El caso sin resolver de la desaparición de Sonia Iglesias, el atraco en el que falleció la policía Vanessa Lage y un compañero resultó herido, el crimen de Secundino en Chancelas (Poio), el conflicto por la gestión de los mercadillos y el conflicto de las preferentes. Cinco hechos que han escrito la crónica de sucesos de los últimos cinco años en Pontevedra y también los cinco acontecimientos que han marcado los cinco años de cargo del subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Antonio Coello.
Con motivo de su jubilación este sábado 26 de noviembre, día en que cumple 70 años, Coello ha convocado a los medios de comunicación de Pontevedra a modo de despedida. Durante un desayuno informativo, hizo balance y aseguró que una de las espinitas que se lleva clavadas es que durante su período en el cargo no se haya resuelto la desaparición de Sonia. Pero no lo da todo por perdido, pues "me consta que la policía sigue trabajando" y confía en que "se esclarezca y dé tranquilidad a la familia" gracia a la profesionalidad de las Fuerzas de Seguridad, el "día a día" de trabajo y la suerte, pues "siempre hay que tener un poco de suerte".
La otra cara de la moneda del trabajo policial la sitúa el todavia subdelegado en el crimen de Secundino en Chancelas, que "tuvo una resolución inmediata" y "se hizo justicia", pues las dos autoras ya han sido condenadas. En este caso se generó una polémica cuando Coello y los mandos de la Guardia Civil ofrecieron una rueda de prensa para informar sobre la resolución del caso un poco antes de la detención de las dos sospechosas. Este jueves, asumió lo ocurrido y volvió a "pedir disculpas al poder judicial" de Pontevedra, pero justificó su actuación por la necesidad de "calmar" la alrma social que se había generado.
La tristeza le invade cuando recuerda la muerte de Vanessa Lage y "los silencios en la Comisaría de Vigo" y de la problemática derivada de las participaciones preferentes lo "prolongado en el tiempo" del conflicto y el "comportamiento impecable" de la mayoría de los afectados, que lo estaban "pasando muy mal". Y en esos dos casos y en todos los que se han dado a lo largo de su período en la Subdelegación destaca el "comportamiento ejemplar" de las Fuerzas de Seguridad del Estado, tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil.
"Evidentemente que tenemos que mejorar todos, individual y colectivamente", reconoce Coello, pero agradece el trabajo de ambos cuerpos policiales porque contribuyen a "la paz social", tienen un importante papel preventivo de la delincuencia y consiguen que "la provincia y la capital son seguras".