El empresario Ángel Martínez Pérez, conocido como 'Lito', que durante años ha sido considerado el rey de las verbenas de Galicia por su control de la mitad de las empresas del sector y de orquestas como Panorama, París de Noia y Filadelfia, se sentará la próxima semana en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Pontevedra para rendir cuentas por seis delitos contra la Hacienda Pública.
Por estos delitos, se enfrenta a una pena total de 14 años de prisón y el pago de 52,7 millones de euros: una multa de 21,6 millones él, otra de 21,6 millones su sociedad y la devolución al Estado de 9,5 millones de impuestos defraudados durante los años 2011 y 2012.
El juicio está previsto para el próximo jueves 2 de febrero a las 10.00 horas en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra con 'Lito' como único acusado en un procedimiento que es resultado de años de investigaciones por parte de Hacienda y del fiscal de delitos económicos de Pontevedra, Augusto Santaló, tras tener conocimiento de que Espectáculos Lito no había tributado lo debido en el impuesto de sociedades, el IRPF y el IVA de los años 2011 y 2012.
El escrito de acusación formulado por el fiscal sostiene que en esos dos años la contabilidad oficial de Representaciones Lito "no recoge la imagen fiel de la empresa", pues se contabilizan al 100% los ingresos de los clientes que quieren factura, pero eso supone aproximadamente un 8% de lo facturado, cuando los que no piden factura son el 92% restante.
Además, tampoco se recogen los gastos por los servicios de las orquestas, que son opacas, ni los de los representantes utilizados para conseguir las contrataciones y se contabilizan como gastos facturas emitidas por otras empresas del grupo por distintos conceptos como material o transporte. Dada esta circunstancia, para poder conocer la verdadera realidad económica por la que debería tributar es necesario analizar documentación extracontable.
El fiscal recuerda que la misión de Espectáculos Lito no se limita a poner en contacto a los clientes con las orquestas, sino que su cifra de negocio viene determinada por el producto vendido, que procede de la producción musical y de la intermediación. El balance de actuaciones por orquesta y el balance de actuaciones por representante se conoce por la documentación no oficial y permite fijar el volumen total del negocio por el que debería pagar los distintos impuestos.
Los representantes de la empresa han reconocido ante el juzgado controlar entre un 50 y un 60% del sector, es decir unos 20 millones de euros al año, y las investigaciones realizadas permiten al fiscal concluir que la empresa ingresó en el año 2011 26.096.785 euros frente a los 2.160.422, 76 euros declarados y en 2012 un total de 23. 973.409 frente a 1.997.967,39.
Partiendo de los ingresos y gastos analizados, el resultado contable (rendimiento) en el ejercicio 2011 ascendió a 998.194,87 euros y a 969.097,65 en el ejercicio 2012, cuando la contabilidad oficial tan sólo recoge 47.319,38 el primer año y 24.810,91 el segundo. Esto implica que en el impuesto de sociedades dejó de pagar a Hacienda una cantidad que supera los 50.000 euros.
Esa diferencia detectada en el impuesto de sociedades también se detecta en el caso del IVA y el fiscal mantiene que la cuota defraudada por este impuesto en el ejercicio 2011 asciende a 4.308.547,02 euros, y en el ejercicio 2012 a 4.039.592,01. Además, resalta que tenía a su servicio a un número importante de agentes comerciales que en esos años investigados no emitieron factura por los servicios ni se le practicó la retención correspondiente, de tal modo que dejaron de retenérsele 347.104,87 euros en 2011 y 323.411,95 en 2012.