En medio de la polémica que rodea el retraso hasta el 16 de diciembre del encendido del alumbrado navideño en Pontevedra, el alcalde ha vuelto a defender la decisión adoptada por el gobierno municipal, que la ha justificado apelando al necesario ahorro energético.
"Atrasar uns días a iluminación parécenos un xesto simbólico que é necesario neste momento", ha sostenido Miguel Anxo Fernández Lores, para aumentar la concienciación de la sociedad respecto del consumo "excesivo" de energía y de la lucha contra el cambio climático.
Pontevedra, ha reiterado Fernández Lores, "vai a ter iluminación de Nadal, só que se atrasa uns días". Aunque reconoce que este alumbrado "dá alegría" a la ciudad, considera que "non é un drama" que las luces de navidad se enciendan unos días más tarde.
El alcalde asegura que "afecta moito máis" al comercio la crisis económica, la elevada inflación y la alza de precios o la pérdida de poder adquisitivo de la clase media "que uns días máis ou menos" con la iluminación navideña encendida.
Sea como sea, asegura que "respecto a opinión de todo o mundo" y afirma que le parece "espléndido" que los comerciantes decoren e iluminen sus comercios en estas fechas para animar sus establecimientos e incentivar el consumo.
Desde el Concello defienden el esfuerzo que están realizando "todos os días" para situar a la ciudad como referente, en otras cuestiones, en la organización de eventos deportivos, que atraen a miles de personas a Pontevedra durante todo el año.
Eso también es promocionar el comercio, asegura el alcalde, que reconoce que retrasar este alumbrado "poder ter un efecto" sobre el comercio, pero que en todo caso "é menor" con respecto a la apuesta por la promoción de la ciudad "que facemos todo o ano".