El sistema de autocita diseñado por el Servizo Galego de Saúde para el proceso de vacunación frente a la covid-19 empezará a funcionar el próximo lunes 5 de julio. A partir de ese día, las personas que "soliciten ser vacinados por distintos motivos" podrán seguir este protocolo, que se seguirá en paralelo a la vacunación ordinaria por grupos de edad.
El sistema de autocita no estará disponible para toda la población, sino tan solo para las personas que no estén dentro de la campaña de vacunación. Esto es, la próxima semana la Xunta vacunará a personas de 30 a 39 años, de modo que ese colectivo no podrá pedir autocita. Solo podrán hacerlo los mayores de 39 por "repesca" y los menores de 30.
El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, anunció este jueves, tras el Consello de la Xunta, que en cuestión de días terminarán de poner la primera dosis a los mayores de 40 y, si se cumplen las previsiones, la próxima semana se podrá completar la segunda dosis a 100.000 gallegos mayores de 40 años y se empezará con la primera dosis de 60.000 personas de menos de 39. En concreto, se podrá citar a la población de 37, 38 y 39 años de la comunidad.
Feijóo lamentó que "de momento non temos vacinas para vacinar aos mozos", en referencia a las personas de menores de 30 años.
Esta falta de vacunas, que impedirá su inmunización hasta finales de agosto, preocupa especialmente porque en estos momentos más de la mitad de los nuevos positivos en Galicia son personas menores de 30 años. En concreto, el 51,3% de los nuevos contagiados.
Además, el 38% de los ingresos por covid-19 en la comunidad son en personas de esta edad, de modo que los datos acreditan que "este colectivo é agora o grupo de poboación máis vulnerable", de ahí que lamente que "non temos vacinas para inmunizalos de maneira inmediata".
Feijóo también valoró este jueves los botellones que se han detectado en distintas ciudades gallegas, entre ellas, la de Pontevedra. Estas actividades son, para el presidente gallego, "un disparate contra la salud pública" y pide a las distintas policías locales y también a la Policía Nacional que se extremen los controles, pues "é impropio que se mire para outro lado e que se vexan con normalidade cando é o epicentro dos novos contaxios".
Lo contagios proceden de botellones y también, según Feijóo, del ocio descontrolado, la retirada de las mascarillas y no respetar la distancia de seguridad.