Pontevedra ha dejado de utilizar agua del Pontillón do Castro, una medida que se había adoptado por parte del gobierno local después de que se registrara en el fin de semana una bajada del caudal del río Lérez que abastece a las estaciones de bombeo para el suministro del agua.
La causa de suspender esta captación se encuentra en que, en las últimas horas, el caudal medio del Lérez ha crecido casi el doble del volumen que presentaba durante el fin de semana pasando de una aportación media de 1,9 metros por segundo a 3,10 y esto sucede sin que haya llovido.
Ante estos hechos, el portavoz del Gobierno local, Raimundo González, culpaba este mediodía a Ence de ser la responsable de un consumo abusivo del agua de los pontevedreses. "Tivo que ser Ence quen cortou o grifo do subministro", indicó el concejal.
El Concello de Pontevedra ha tenido constancia de la presencia de técnicos de Augas de Galicia durante primeras horas del miércoles en la estación de bombeo. Raimundo González cree que alertaron a Ence para que rebajara el consumo.
"Lamentamos e consideramos grave que unha empresa xogue cos recursos hídricos dos cidadáns. Eles están despilfarrando auga", apuntó el concejal señalando que aquella cantidad que no utilizan en su proceso de producción es expulsada a la ría mientras que Pontevedra precisa del embalse do Pontillón do Castro para garantizar la llegada del agua a las viviendas. "É grave que Ence abuse dunha maneira tan descarada", concluyó el portavoz del gobierno de Fernández Lores.
ENCE NIEGA CAMBIOS EN SU PROCESO DE CAPTACIÓN DE AGUA
Por su parte, los dirigentes de la fábrica pastera rechazan esa afirmación de Raimundo González. Dicen que la captación de agua ha sido la misma que en otras ocasiones y que la variación del cauce no guarda relación con el Centro de Operaciones de la empresa en Lourizán
Desde el departamento de prensa solo indican que los técnicos de Augas de Galicia no tuvieron un encuentro personal con representantes de Ence y que la fábrica aplicó hace unas semanas medidas para reducir el consumo de agua con la intención de contribuir en todo lo posible a mitigar los efectos de la fuerte sequía que padece Pontevedra y su comarca.