El alcalde del Concello de Poio, Ángel Moldes hizo este miércoles una valoración muy positiva de las fiestas de San Xoán, tanto por el "éxito de participación", como porque fueron unas fiestas "seguras e inclusivas". Así lo señaló el alcalde en rueda de prensa, junto al concejal de Festejos, Fran da Silva.
Moldes reconoció que las novedades que el Gobierno incorporó la última hora a la programación fueron "moi ben recibidas polos asistentes".
Como ejemplo del éxito de participación, el rexidor de Poio explicó que las ventas de platos de sardinas aumentaron un 50% y que, por primera vez, los horarios de venta se prolongaron hasta pasada a 1 de la madrugada.
También se contó con más aparcamientos disuasorios, 670 plazas más con respecto a ediciones anteriores, y por eso agradeció a todos los propietarios de las hincas que las cedieran de manera totalmente desinteresada.
Una de las principales novedades de estas fiestas fue a reservar una hora diaria de atracciones en silencio para hacer que sean más inclusivas, una medida por la que recibieron el agradecimiento de muchas familias y que, para futuras ediciones, intentarán aumentar "como mínimo, a dúas horas diarias".
También destacó Moldes la fiesta infantil, y ya adelantó que el año próximo se aumentarán los hinchables y mantendrán la animación musical, la espuma y el agua.
Con respecto a la entrega de premios a los deportistas, este año se cambió el formato, de manera que todos los miembros de los equipos pudieran subir a la tarima y recibir una medalla de recuerdo, cuando hasta ahora solo podía acceder un niño en representación de cada equipo y recibía un único trofeo.
Con todo, Moldes también reconoció que tuvieron que solucionar problemas "en tempo récord", ya que la unos días de comenzar la fiesta no estaba contratado ningún suministro eléctrico para las fiestas y "as partidas para facelo estaban esgotadas, nin se contaba coa autorización da Subdelegación do Goberno para os fogos artificiais". Así, explicó que tuvieron que hacer un plan de emergencia y buscar una localización diferente para poder contar con el permiso y que los vecinos disfrutasen de los fuegos artificiales del San Xoán.
Por último, el alcalde agradeció "a disposición, axuda implicación de todos os traballadores municipais sen excepción", así como de los cuerpos de seguridad, desde la Guarda Civil, hasta la Policía Local y Protección Civil, "que estiveron totalmente coordinados para garantir que estas fosen unhas festas totalmente seguras".