El sábado de carnaval es uno de los días grandes del año en la ciudad, y aunque en esta ocasión no se celebra el habitual desfile, el colorido y diversión es la tónica en las calles.
Desde primera hora de la jornada los pasacalles amenizan el paso por diferentes puntos del casco urbano, y en cada rincón puede encontrarse a niños y mayores con sus disfraces.
A todo ello se han sumado dos talleres infantiles de carnaval, uno en horario matinal en la Praza de Barcelos y otro a media tarde en la Rúa Serra.
La programación festiva la completaba la representación de carnavales tradicionales, con desfiles por el casco histórico del Entroido de Samede y del Folión Labregos de Trives, y también una batucada a cargo de la agrupación Olodum do Coio.