La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade publicaba este lunes en el Diario Oficial de Galicia (DOG) el anuncio por el que se somete al trámite de información pública el proyecto de transformación integral de la carretera PO-546, la conocida como carretera vieja entre Marín y Pontevedra.
El proyecto contempla la creación de un eje de movilidad sostenible con una inversión que ronda los 6,6 millones de euros. Tienen como objetivo mejorar la funcionalidad de la carretera entre Mollavao y Os Praceres, en el municipio de Pontevedra. La propuesta se orienta al tránsito de peatones, ciclistas y transporte público.
La intervención se centra en la construcción de un itinerario por el margenderecho de la carretera autonómiuca, de 3,5 kilómetros de longitud. Entre las actuaciones se incluye la separación con el trazado de la senda en la travesía de Gandarela,, debido a la falta de espacio entre las construcciones actuales. Se acometerá la creación de una glorieta a la altura de la intersección de acceso al Centro de Investigaciones Forestales de Lourizán con la PO-546, con la finalidad de reducir la velocidad de los vehículos que acceden a la travesía de Garandela procedentes de Marín y mejorar la seguridad en el acceso a este espacio.
La glorieta, según la Xunta, también facilitará el cambiio de sentido de los vehículos que procedan de Marín y quieran acceder al futuro aparcamiento disuasorio tipo carpooling. Este aparcamiento también se sometía este lunes a la información pública.
También se mejorarán las paradas de transporte público, favoreciendo la movilidad en autobús entre Marín y Pontevedra, y se renovará la iluminación en el tramo de actuación. También se ejecutarán dos pasarelas a distinto nivel de la senda peatonal y muros de sostenimiento debido a la proximidad de la vía de ferrocarril en algunas zonas.
Además, se habilitará un mirador a la ría de Pontevedra aprovehcando el espacio en el margen derecho de la calzada, con un pequeño parque infantil y zona verde.
La propuesta de la Xunta busca favorecer un espacio de movilidad peatonal-ciclista que conecte el núcleo de Marín con la ciudad de Pontevedra.
El aparcamiento disuasorio en la PO-546, que también se somete a información pública, busca el fomento del vehículo compartido. Se creará entre la carretera de acceso al Pazo de Lourizán y la intersección con el núcleo de Rozo con la carretera.
La inversión se acerca a los 500.000 euros y la superficie de este espacio será de 2.465 metros cuadrados, con 71 plazas, dos para personas con movilidad reducida, y tres puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Las personas interesadas en formular observaciones a estos proyectos tienen un plazo de 30 días hábiles, a partir de este martes 3.