Ya son cuatro las entidades que en las últimas semanas mostraron su preocupación por las agresiones al patrimonio catalogado existente en el monte vecinal de la parroquia de San Xulián.
La Xunta de Galicia, el Concello de Marín y el Seprona recibieron distintos escritos firmados por la Irmandade Illa de Tambo, la asociación cultural A Forneiriña, el colectivo ecologista Luita Verde y Defende o Monte Pituco (Pornedo) denunciando los daños provocados por unos trabajos de desbroce encargados por la comunidad de montes de San Xulián sin señalización previa de los yacimientos y sin supervisión técnica ni arqueológica.
Como consecuencia de la falta de previsión de esas actuaciones, el grupo número cinco del conjunto rupestre de la Carrasca resultó afectado por las cadenas mecánicas de un tractor, provocando una visible raspadura en la superficie de la piedra que contiene grabados de la Edad del Bronce, clasificados como Bien de Interés Cultural (BIC) de Galicia.
El paso de la desbrozadora también causó la rotura de otras piedras de menor tamaño situadas en la orilla del camino, al lado de los petroglifos.
Pero además, en el marco de estos trabajos también estuvieron en serio peligro de destrucción los grabados rupestres del Pornedo, otro de los elementos inventariados y catalogados en la zona como BIC, ya que las máquinas desbrozaron el sendeiro que pasa al lado de este yacimiento.
El colectivo Defende o Monte Pituco acusa a la comunidad de montes de San Xulián como la "primera responsable de esta negligencia", y señala que esta acción está tipificada como "infracción grave" en la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia que entró en vigor el pasado mes de agosto. "Pero también la Xunta y el Concello tienen responsabilidades directas por no ejercer sus competencias en materia de protección y conservación", añaden.
Luita Verde y Defende o Monte Pituco instaron a la Xunta y al Concello de Marín a esclarecer los hechos y a tomar las medidas oportunas para que no se vuelva a repetir esta lamentable situación.