"Non é a mellor opción pero é a única viable", en estos términos se ha referido este lunes el concejal de Infraestructuras, César Mosquera al trazado de la variante de Alba propuesto por la Xunta.
Moquera ha informado en rueda de prensa de las alegaciones que va a presentar el Concello de Pontevedra a este proyecto y en las que pide que "se suavice e se adapte al territorio", para incluir los flujos peatonales y de ciclistas, ya que ahora está diseñado como un "vial duro".
La xunta de goberno local ha aprobado este lunes los informes del estudio de trazado y de impacto ambiental, para darles traslado a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda.
Los departamentos municipales de Arquitectura, Arqueología, Ingeniería y Medio Ambiente Natural señalan una serie de cuestiones que deben corregirse en este proyecto y que, además de los flujos peatonales y ciclistas, atienden a las conexiones con los viales existentes, piden corregir el fuerte impacto del trazado en el entorno del CEIP Campañó, o a la contaminación acústica en los núcleos de población.
Los técnicos también recomiendan "prever, dentro de la zona de posible ampliación de la carretera, la implantación de un itinerario pavimentado, paralelo a la variante, dotado de iluminación pública y adaptado a esos usos".
Mosquera considera que la actual propuesta de trazado es la única viable, ante la negativa del Ministerio de Fomento de permitir el enlace con la N-550 en la propuesta inicial (alternativa 1) por ser un punto demasiado distante de la ciudad.