El Concello de Pontevedra acaba de emitir un bando firmado por el alcalde Miguel Anxo Fernández Lores en el que adopta una serie de medidas de reducción del consumo de agua del abastecimiento municipal a causa de la situación de pre-alerta decretada por la Xunta por sequía y baja del caudal del río Lérez.
Según justifica el regidor son "medidas excepcionais dirixidas a asegurar o aforro de auga e o uso racional do recurso", entre otras, prohibir el uso de agua apta para consumo humano para llenar piscinas particulares, riegos de jardines y limpieza de coches por particulares; reducir los consumos municipales (baldeos de las calles, riegos de jardines, fuentes ornamentales, y otros); promover la instalación de dispositivos de ahorro doméstico para evitar el uso innecesario del agua, tales como la utilización de sistemas de ahorro de agua en los grifos, cerrar la llave durante el cepillado o emplear la ducha en el lugar del baño para evitar el uso de agua innecesario.
El Concello también insta a las empresas e industrias a minimizar el consumo y a un uso razonable del agua del abastecimiento municipal, toda vez que el uso prioritario es el del abastecimiento a la población.
El bando recuerda a la ciudadanía que "es necesario tomar conciencia de la importancia de llevar a cabo medidas de ahorro en el consumo del agua, evitando el malgasto y minimizando los usos prescindibles".
La concejala del Ciclo da Auga, Carme da Silva, ha explicado que estas medidas se aplicarán a partir de este martes. "Queremos anticiparnos ao escenario de alerta porque é fundamental que a poboación se conciencie", apuntó. Por ahora, el suministro a Pontevedra y al resto de concellos está garantizado.
"Segundo a evolución do río sabemos que os escenarios poden mudar en cuestión de días. Se o río se comporta tal e como estes días, de xeito estable, é posible que tardemos en entrar no escenario de alerta, pero é un escenario que se pode producir. Cremos que é máis razoable indicar hoxe esta serie de medidas, froito da reflexión cos servizos técnicos, que xa apostan por certas prohibicións, e non dicir hoxe que se recomenda e en tres días que se prohibe. É máis simple desde xa que non se permitan certos usos e non confundir a poboación", dixo Carme Da Silva.
El Concello también aprobó un Plan Excepcional de Actuaciones ante situación de Escasez Coyuntural de recursos hídricos, a causa de la situación de sequía, en el que se prevén una serie de medidas para el suministro en baja.
Los técnicos del Concello y los de Viaqua, la empresa concesionaria del servicio del agua, han establecido cuatro niveles: normalidad, prealerta, alerta y emergencia.
El tercer nivel, de "alerta", es el que fijaría restricciones al estar el río con un caudal de 0,87 y 1,17 metros cúbicos por segundo. Las prohibiciones que el Concello acaba de poner en marcha incluirían un régimen de sanciones, multando los incumplimientos.
En el último nivel del protocolo, si el río Lérez marcase registros por debajo de los 0,87 metros cúbicos por segundo, Pontevedra dejaría de captar del río y se tendría que abastecer directamente del embalse de O Pontillón do Castro que tiene capacidad de suministro sólo para un mes.
El Servicio Municipal de Aguas y el personal técnico del Concello están trabajando en soluciones, tanto de emergencia como a largo plazo, para el caso de que la situación de sequía se prolongue en el tiempo; pero si la situación persiste se adoptarán otras medidas que se irán informando la ciudadanía.
"Precisamos da axuda dos nosos veciños e das nosas veciñas para conseguir un consumo responsable que axude a manter as reservas o máximo tempo posible", asegura el alcalde en este bando.