Técnicos de la Estación Fitopatológica de O Areeiro, dependiente de la DeputaciónProvincial de Pontevedra, acudieron en los últimos días a Mourente para hacer una evaluación del estado del famoso carballo de Santa Margarita después de la reciente rotura de una rama de 200 kilos.
La conclusión es que se hace necesaria una intervención y el Concello no ha dejado esperar su reacción y ya ha anunciado que coordinará con las consellerías de Medio Ambiente y Cultura de la Xunta de Galicia y con el Arzobispado de Santiago una "actuación urgente".
El concejal de Medio Natural, Alberto Oubiña, se puso en contacto con las dos consellerías y con la delegación de Patrimonio del Arzobispado de Santiago con el fin de coordinar esta actuación urgente y también para definir una estrategia de largo recorrido para conservar y mantener en el mejor estado posible el carballo de Santa Margarita.
Según sostiene el Concello, lo prioritario es que autoricen las intervenciones urgentes definidas por los expertos de O Areeiro en su reciente evaluación-diagnosis sobre el estado del árbol. Este informe se elaboró la petición del Concello y acaba de ser entregado por los técnicos. A su vez, desde la administración local se derivó ya a la Xunta.
Estas actuaciones urgentes que reclaman los técnicos de O Areeiro son sujetar las ramas principales que más carga presenten, principalmente la de grandes dimensiones que da hacia la vía principal y que ya presenta un boquete en toda su longitud; repetir el tratamiento biológico que se había dado en el pasado; y darle un tratamiento nuevo con un producto a base de hongos que pueden limitar el desarrollo de hongos patógenos del suelo.
Hasta el momento no hay respuesta oficial de la Xunta a la comunicación del Concello, pero Alberto Oubiña señaló la buena disposición mostrada al requerimiento hecho y espera una respuesta en breve.
El pasado mes de octubre el Concello de Pontevedra presentó un proyecto para la mejora del entorno de la capilla y el carballo de Santa Margarita, pero está paralizado a falta de permisos de la Xunta y del Arzobispado.