El Concello de Marín inició los trámites para transformar la dársena del conocido como "cementerio de chalanas" en una piscina al aire libre. En este proceso el concejal del Bloque Nacionalista Galego, Tino Iglesias, acaba de presentar una alegación formal a este proyecto destacando "varias anomalías administrativas y de planificación" propuestas por el gobierno local de la alcaldesa por María Ramallo.
La discrepancia en las fechas y en la orden de las solicitudes de autorización para la ejecución de las obras y la concesión demanial, donde se propone un período de dominio público portuario de 50 años, suscitó preocupaciones sobre un posible defecto administrativo que podría afectar la validez del proyecto. "As solicitudes deberían ser presentadas de forma conxunta para evitar discrecións que comprometan a transparencia do proceso", afirmó Iglesias.
Alén de eso, el BNG criticó el mantenimiento previo de la dársena, donde a pesar de inversiones significativas en 2011, las estructuras requirieron reparaciones una década después. La formación nacionalista demanda que la Autoridad Portuaria asuma la responsabilidad de dejar la dársena en perfecto estado antes de cualquier traspaso al ayuntamiento, incluyendo la limpieza y reparación de los paramentos de piedra y los fondos de la dársena.
La propuesta actual del gobierno para instalar un pantalán flotante destinado la embarcaciones deportivas fue también motivo de controversia. Según el BNG, el proyecto no refleja adecuadamente el uso cultural y histórico que podría beneficiar más al vecindario. "Propoñemos que este espazo sexa transformado nun museo ao aire libre de embarcacións tradicionais, ofrecendo unha visión educativa e turística que celebre a rica historia marítima de Marín", explicó Iglesias.
Adicionalmente, el BNG también realizó consultas a la Secretaría General de Portos del Estado para esclarecer la viabilidad de adaptar el uso de la dársena y la lámina de agua del Paseo Alcalde Blanco para actividades de baño, "dado que a regulación actual prohibe tales prácticas nas instalacións portuarias"; así como la solicitud de aclaración específica del apartado de usos náuticos-deportivos permitidos por el reglamento portuario.
Tino Iglesias concluyó instando al gobierno municipal a considerar un enfoque "máis integrador e respectuoso co patrimonio cultural". "É crucial que protexamos e conservemos os espazos que forman parte da memoria do noso pobo, en vez de convertelos en simples instalacións recreativas que non resoan coa identidade de Marín", manifestó.