El colectivo Capitán Gosende ha descubierto un nuevo grabado rupestre que no estaba documentado en Cerdedo-Cotobade. Fue, concretamente, en el núcleo de Cavadosa.
El hallazgo fue durante las labores que estaban realizando para estudiar el deficiente estado de conservación del puente medieval del lugar.
El petroglifo se componen de un agrupamiento de cinco coviñas de 5, 7, 9, 10 y 15 centímetros de diámetro y buena hondura. Las coviñas fueron talladas en la parte superior de un cachote de granito que integra los pilares de una casa.
Esta construcción se sitúa a la salida del lugar, en dirección al vecino lugar de Abelaíndo.
El soporte, según esta asociación, es un fragmento de laxe, extraído de una afloramiento más grande que está situado en las inmediaciones.
La piedra durmiente es pasante, por lo que fue imposible su inspección por la parte interior del inmueble, ya que el espacio está cubierto de una gruesa capa de estrume.
El nuevo hallazgo se ha denominado petroglifo de la Cavadosa y hace el número 59 de los petroglifos inventariados en el antiguo municipio de Cerdedo.