"Después de once días de incertidumbre conseguí saber el resultado del test PCR"

Pontevedra
06 de mayo 2020

Una vecina de Pontevedra explica cómo ha pasado dos semanas de reclusión absoluta desde que le instaron a quedarse en casa como caso sospechoso hasta que consiguió saber que dio negativo en coronavirus

Persona confinada en su casa Mónica Patxot

M.L. es una mujer que vive en Pontevedra. Su profesión le permite teletrabajar, por lo que declarado el estado de alarma sus salidas a la calle se limitaban a lo imprescindible. El confinamiento sí que agravó sus dolencias habituales, cefaleas y dolores musculares. Mediado el mes de abril, comprobaba que el tratamiento farmacológico habitual no surtía efecto. 

Comenzó a notar picazón y manchas rojas en los pies. Síntomas que se hicieron evidentes en la mano, acompañados de una considerable hinchazón en un dedo. "Tenía visto y escuchado que aunque podía ser más frecuente en adolescentes y niños, había adultos que podían manifestar síntomas de contagio por COVID19 en la piel", explica.

La inflamación aumentaba y optó por acercarse a la farmacia. "Quizás fue imprudente por mi parte. Nada más verlo me dijeron eso es un sabañón y puede ser síntoma de coronavirus, así que marcha para casa, no salgas y llama al número de información del Sergas".

Llamó al servicio donde le preguntaron por los síntomas, profesión, posibles contactos con personas contagiadas ... "era un caso sospechoso de coronavirus, así que me dijeron que no saliera de casa, me dieron las pautas para hacer el test del llamado Covid auto para tres días después y que solicitara consulta telefónica con Atención Primaria para informar del caso".

Ese jueves 23 realizaba la prueba en el Recinto Ferial, donde le indicaron que en un par de días, máximo tres, la llamarían para darle el resultado. "Pasaron los dos días, pero como esa semana estaba siendo crítica y los test diarios que se hacían elevados, seguí esperando".

Puestos en el lunes 27, tras una semana de confinamiento absoluto, decidió llamar de nuevo al número de información del Sergas: "hay algunos retrasos, pero le llamarán, si no es por esta vía, por Atención Primaria". Así que le tocaba seguir esperando, con unos síntomas que remitían pero otros no.

El jueves 30 repitió la llamada y en este caso la respuesta fue que "están priorizando las llamadas para los casos positivos, así que ya le llamarán, me excusaron; pero tenía constancia por otras dos personas que habían hecho el test un día y dos días antes, que les habían llamado en el plazo para informar de los negativos". Trató de conseguir una respuesta solicitando cita telefónica en Atención Primaria, pero no hubo llamada.

El sábado 2 de mayo en otro intento más por saber qué había pasado con el test y el resultado, volvía a pedir cita en Atención Primaria. Este pasado lunes 4 de mayo, tras quince días sin poder salir de casa para nada, recibía la llamada del médico de familia y consiguió saber el resultado: negativo. "La prueba ya fue realizada el día 23" fue la única explicación evidente que pudo obtener.

¿Caso inusual, desafortunadamente excepcional?, "No lo sé, igual dentro de un mes llaman para comunicarme el resultado. Lo que sé es que han sido quince días de impotencia, de romperte la cabeza y de reclusión absoluta sin motivo", lamenta.