Un convenio entre el Concello y la Deputación de Pontevedra permite desbloquear la reforma integral de la carretera de Tomeza por la que discurre el Camino de Santiago Portugués.
El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, acaba de firmar el convenio de colaboración con la Deputación para acometer esta reforma con el propósito de mejorar la seguridad viaria en todo su trazado.
La Xunta de Goberno local aprobó en el mes de julio a firma de este convenio, que estuvo redactándose en estos meses entre las dos instituciones. Con la firma, quedan desbloqueadas las cuantías presupuestarias que permitirán licitar y ejecutar el proyecto.
El convenio, paso previo a la licitación de la reforma, recoge que la EP0002 Marco - Tomeza - Figueirido es una carretera de plataforma muy irregular sin casi arcenes ni aceras que crea situaciones de riesgo para sus usuarios, especialmente en este tramo del Camino de Santiago.
El proyecto contempla una intervención en 2,5 kilómetros y consiste en ejecutar obras de pavimentación de la carretera y crear una senda peatonal de hormigón colorado de 2,5 metros de ancho en el margen derecho de la carretera. Se implantarán zonas de convivencia de las movilidades donde no sea posible alcanzar ese ancho mínimo. Además, se hará un sistema de drenaje de las aguas pluviales y la reposición de los servicios que se vean afectados por la ejecución de estas obras.
El presupuesto total de la obra es de 1.724.510,78 euros y la financiación será el 80% a cargo de la Deputación, también encargada de la licitación y de la ejecución de la obra. El Concello asume el 20% restante y también se encarga de financiar las expropiaciones, valoradas en 19.835,96 euros.
El convenio también incluye la regularización de distintos tramos de carreteras provinciales que pasan a ser de titularidad municipal. En concreto se trata de un tramo de 500 metros de la carretera de Xoan XXIII a Figueirido que pasa a ser de titularidad municipal solamente hasta la subida al colegio de San Martiño, así como tres tramos de la carretera de Bora al Salgueiral que quedaron fuera del nuevo trazado de la vía (son los denominados tramos muertos). Están situados en distintos puntos de la carretera y suman un total de 218 metros.