Denuncia a Adeslas y el 061 por siete horas de "angustia e incredulidad” en las que se negaron a certificar la muerte de su tía

Pontevedra
11 de enero 2025
Actualizada: 10:15

Ángeles Durán encontró a su tía fallecida en cama el 30 de diciembre y, tras la negativa del 061 y Adeslas, acabó recurriendo a la Policía Nacioal. Finalmente, una forense tuvo que confirmar la muerte

Ángeles Durán muestra las denuncias presentadas en el juzgado, en Adeslas y en Muface Mónica Patxot

El 30 de diciembre, Ángeles Durán encontró a su tía muerta en la cama de su domicilio. De inmediato, pidió ayuda, pero se encontró con que ni el 061 ni la aseguradora Adeslas se la dieron, negándose a enviar a alguien a la casa para certificar la defunción. Empezaron ahí "siete larguísimas horas" que ahora han derivado en una denuncia. 

Ha presentado quejas en Adeslas y en Muface, pues la fallecida era mutualista de esta entidad, y también una denuncia en el Juzgado de Guardia de Pontevedra. Además, el juzgado tiene en su poder un atestado presentado por la Policía Nacional, que tuvo que acudir a la vivienda y llamar a la forense que acabó certificando el fallecimiento. 

La tía de Ángeles tenía 91 años y estaba encamada en su vivienda de A Ruibal, en la parroquia pontevedresa de Salcedo, pero nada le hacía prever que fuese a fallecer. Fue "literalmente, de una hora para otra". Ella vive en la casa de al lado y la visitaba constantemente. A las 17.30 le dio la merienda y "merendó como una leona", a las 19.30 horas "estaba viendo la novela" y, cuando regresó a las 20.30 horas para prepararla para dormir, la encontró muerta. 

Ahí empezó su odisea. La relata entre la indignación, la incredulidad y las ganas de que esto no se repita nunca más. "Lo único que pretendo es que la gente se entere", explica, al tiempo que muestra las denuncias presentadas el 2 de enero. 

Ángeles Durán muestra las denuncias presentadas en el juzgado, en Adeslas y en MufaceMónica Patxot

Lo primero que hizo fue llamar al 112, si bien en la central de emergencias le indicaron que el procedimiento que debían seguir era llamar a la aseguradora. Así lo hizo, pero en Adeslas "nos dijeron que llamasemos al 061". Asi lo hicieron, pero se encontraron con que se pasaban la pelota de un lado al otro, pues en el 061 "nos dijeron que este trámite correspondía a Adeslas". 

Llamó por segunda vez a Adeslas y la respuesta, según relata, fue que "no disponían de personal para acudir al domicilio". Tras "muchos intentos" infructuosos de que alguien acudiese a su domicilio para certificar la defunción, acabaron llamando a la Policía Nacional "porque ya no sabíamos qué hacer". 

Desde la Comisaría intentaron ayudarles primero por teléfono y luego dos patrullas se desplazaron a su vivienda. También los policías realizaron "muchos intentos a Adeslas y al 061" hasta que, finalmente, acabaron llamando a una forense, que fue la que acudió al domicilio y certificó el fallecimiento. 

Esta vecina de Salcedo indica que tan solo la Policía Nacional y la forense le ayudaron aquella larga noche. "Se portaron muy bien, lo intentaron todo", asegura, incluso quedándose hasta que todo se solucionó pasadas las tres de la madrugada.

La acompañaron en sus "siete horas de angustia, incredulidad y desesperación" esperando a que certificasen la muerte de su tía, el tiempo que pasó desde su primera llamada hasta que finalmente la empresa funeraria se pudo llevar el cuerpo porque la forense certificó que estaba fallecida y se trataba de una muerte natural. 

Ángeles Durán muestra las denuncias presentadas en el juzgado, en Adeslas y en MufaceMónica Patxot

Recuerda esas horas con "incredulidad". Indica que "no me lo podía creer" y que también agentes de la Policía Nacional le trasladaron que "nunca habían visto nada igual". Por eso se ha animado a denunciar, aún convencida de que ni Muface ni Adeslas atenderán sus quejas.

Sí tiene "esperanza en el juzgado" y que, por lo menos, esta actuación derive en algún tipo de sanción. 

Además, le gustaría que la situación se conociese para que lo sepan personas que se encuentren en su misma situación. "A cualquiera le puede pasar en su casa" y ella misma piensa en su suegra, que es también mutualista, y teme que, si también fallece en el domicilio, la situación se repita. 

En su queja en Adeslas, a la que ha tenido acceso este periódico, denuncia "omisión de servicio y no ir al domicilio para hacer el trámite correspondiente" y añade una queja anterior. 

Ángeles Durán muestra las denuncias presentadas en el juzgado, en Adeslas y en MufaceMónica Patxot

Tres días antes, el 27 de diciembre, había llamado para que enviasen un médico o una ambulancia a casa de su tía para atenderla por un problema en un dedo y "me dicen que no tienen servicio disponible ni de médicos ni de ambulancias el fin de semana". Finalmente, le llamó un doctor desde Barcelona y el día 30 sobre las 15.00 horas sí acudió un profesional a la casa. Fue cinco horas antes de la muerte y lo que sucedía "no tiene nada que ver" con la muerte, pero se une a su malestar por la actuación de la aseguradora. 

En su queja en Muface habla de "denigrante situación". A este periódico le traslada su indignación porque "llegado el momento, no eres un ser humano, eres una cifra".