Dicen que diez años no son nada. Pero eso que se lo digan a uno de los restaurantes más destacados de Pontevedra, el Icewolf, que durante todo ese tiempo se ha mantenido como una de las grandes referencias de la gastronomía pontevedresa.
El Icewolf, que nació como coctelería en 2015 en la Rúa Dona Tareixa, en pleno corazón del centro histórico pontevedrés, es el proyecto de dos jóvenes de Lérez, Sergio García y Manuel Acuña, que con poco más de veinte años decidieron iniciar esta aventura en un sector tan complicado como la hostelería.
Y a la vista está que, sobre todo desde que en 2018 incorporaran el restaurante en su proyecto, el esfuerzo ha merecido la pena. Tras una década de crecimiento, su establecimiento es uno de los más aclamados y respetados de la ciudad de Pontevedra.
Además, después de la pandemia, abrieron un segundo local, esta vez en la Plaza de Compostela, en Vigo, en donde mantuvieron el sello de identidad con el que se dieron a conocer, platos "hechos en casa", hechos con mimo, desde cero, en los fogones de sus cocinas.
Lo hacen apostando por utilizar productos gallegos de proximidad y novedosos ingredientes internacionales. Todo ello gracias a una cuidada red de distribuidores que les facilitan la mejor materia prima para cuidar todas y cada una de sus elaboraciones.

Para qué elegir un restaurante tradicional, asiático, italiano, mejicano o árabe si en el Icewolf lo tienes todo. Su carta ofrece una cuidada selección de lo mejor de los cinco continentes, combinaciones sorprendentes para el paladar que aportan carácter y personalidad a cada plato.
"Somos como una plaza pública", explican sus responsables, en donde los comensales tienen a su disposición una selecta carta adaptada a todos los bolsillos y con un menú del día, de lunes a viernes, a uno de los precios más competitivos del mercado actual, 11,50 euros.
Una cocina con sello propio, también con opciones veganas, vegetarianas y para celíacos que, ya por la noche, se transforma en un 'gastropub' en el que seguir disfrutando de su especial concepto fusión en forma de cócteles, que se ofrecen en versiones con y sin alcohol.
Pero, sin duda, la verdadera clave del éxito del Icewolf es su equipo. Profesionales jóvenes y entusiastas, diversos en gustos, edades y personalidades, que fortalecen el sello de identidad del local y contribuyen a darle una vuelta de tuerca a todo lo establecido.
Aunque cuenta con una plantilla bastante estable, "toda la gente que ha pasado por el Icewolf ha dejado su huella y nos ha hecho mejores", subrayan Sergio García y Manuel Acuña, un firme compromiso que les ha permitido llegar a estos primeros diez años de vida.
Alberto es el encargado del restaurante en Pontevedra y la persona de mayor edad de la plantilla. Su amplia experiencia en la hostelería y su conocimiento de la clientela pontevedresa lo han convertido en un referente y un modelo a seguir por los jóvenes.
Junto a él, desde la apertura del restaurante, está Néstor, el encargado de la cocina para el menú del día; mientras que Xela llegó antes de la pandemia y a pesar de su juventud tiene mucha experiencia en grandes restaurantes y una formación profesional superior en sala y en vinos.
Berto, por su parte, es el jefe de cocina. A pesar de tener el ciclo superior de cocina y sala del Carlos Oroza empezó a trabajar en el Icewolf por un curso de coctelería. Es uno de los responsable de ganar el premio de Pontedetapas de este último año a la tapa tradicional.
Haidar es sirio y llegó a España en busca de unas oportunidades que en su país, a pesar de su carrera universitaria, no tuvo. Su edad y el idioma no fue un obstáculo para ir poco a poco cogiendo las riendas de la cocina de Vigo y enfrentarse a unas Navidades muy intensas.
A ellos se suma Amalia, la responsable de redes. Sus estudios y su trabajo han permitido al Icewolf dar un salto en imagen y difusión, especialmente de cara a este décimo aniversario.
La última incorporación al equipo ha sido Carmen, que cuenta con mucha formación y experiencia, lo que le ha permitido adaptarse a la perfección al ritmo del equipo.
Además, el Icewolf incorpora a más de seis trabajadores en las temporadas altas de verano en Pontevedra y de navidades en Vigo, gente joven que combina así sus estudios con una primera experiencia laboral que les resulta tremendamente satisfactoria.
UN DÉCIMO ANIVERSARIO CON NOVEDADES
Para celebrar su décimo aniversario, que se conmemora en la última semana de febrero, el Icewolf tiene una agenda muy completa de eventos.
Será una semana de gastronomía, música, sorteos y recuerdos que tendrá como protagonistas a clientes, personal, proveedores y, en general, a las personas que han hecho posible estos diez años.
Marcará el inicio de una nueva etapa que, entre sus grandes sorpresas, incluye el estreno de Icewolf Baiuca Vigo, una nueva carta e imagen basadas en tradición, gastronomía y calidad, que completará la oferta gastronómica de Pontevedra, que seguirá siendo más "rabuda pero viajada".