David López Veleiro, "David Amor" como nombre artístico. Nacido en Salceda de Caselas en 1980, pero pontevedrés de adopción y vocación. Jugador de balonmano, actor, presentador y humorista, no necesariamente por este orden, aunque él se considera por encima de todo lo primero. El balonmano es su pasión y devoción, pero hacer reír le da de comer y a ello se dedica, con éxito, casi por accidente o casualidad. Porque hacer reír se le da bien. David es un tipo cercano, afable, siempre dispuesto a ayudar a aquel que se lo solicita.
Su estatura le hizo llegar a ser profesional del balonmano, incluso a proclamarse subcampeón del mundo sub-18 con la selección española. Su presencia, a ponerse delante de las cámaras y alcanzar una fama creciente. De lo demás se encarga su "chispa" para sacar partido de situaciones cotidianas, para arrancar una sonrisa a los que le escuchan.
Polifacético. Después de su paso por la TVG, Antena 3 y La Sexta, en breve arranca con un nuevo programa en Cuatro Televisión. De humor, claro, que el balonmano ya no vende y al fin y al cabo hay que comer.
¿Qué hace un jugador de balonmano contando chistes?
Pues vivir, porque lo del balonmano está claro que ya no da. En el balonmano ya viví lo que tenía que vivir, llegué a mi tope y de estas cosas de la vida, acabé en lo que nunca pensé que iba a acabar, pero ahí estoy.
Teucro, Bueu, Novás, Xiria, Cisne, Redondela...Ya has recorrido un buen número de equipos, ¿eres un culo de mal asiento?
Yo pienso que no, pero circunstancias de la vida me llevaron a ir moviéndome, primero porque nadie me quería, como era muy mal jugador me fueron echando, y después no es que me hiciera buen jugador, pero crecí, me hice alto, y cuando empezaron a llamar me fui a donde creí que podía encarar mejor mi futuro, luego hubo otros momentos que me moví por cirscunstancias personales, por ejemplo cuando jugué en el Xiria, que vivía en A Coruña. Este año estoy en la SAR porque tengo compañeros allí jugando que me dijeron que fuese.
Pero ¿tú eres un jugador de balonmano que se metió a humorista, o un humorista que hacía chistes en una pista de balonmano?
Yo soy un jugador de balonmano, primero de todo, porque es lo que llevo haciendo más de media vida y que luego pasé a la interpretación y el humor. Pero de hecho casi siempre antepuse el balonmano a mi profesión actual, incluso a veces perdiendo económicamente. Por ejemplo, el año que fiché en el Teucro estaba presentando un programa propio en la Televisión de Galicia, pero me llamó Pillo y para mí jugar en el Teucro, que es el equipo de mi ciudad, era lo máximo, así que no lo pensé, dejé la televisión y me metí en el balonmano.
¿David López, David Amor, las dos cosas, o como buen gallego, depende?
Depende, porque en el balonmano mucha gente me conoce como Veleiro, que es mi segundo apellido. O sea, que no está muy claro. Son todo eso. David siempre, y depende de la hora del día una cosa o la otra. Pero no es más que una etiqueta, como se suele decir.
¿Cómo llegas a la Televisión de Galicia? que fue, digamos, tu rampa de lanzamiento.
Sí. Fue una cosa rara. Yo empecé estudiando la licenciatura de Ciencias del Deporte, aquí en Pontevedra, y de compañera de clase tenía a María Castro, esta chica pelirroja que es una actriz buenísima. Un día hablando con ella me dijo que estaba en una agencia de modelos en Vigo, y bueno, por seguir sus pasos me metí a probar. Yo tenía mucha curiosidad en general por la vida, por probar cosas y ver cómo eran. Allí se hacían muchos castings y yo hice uno, que lo hice aquí en Pontevedra en el Teatro Principal para "O Rei da Comedia". Cuando llamé me dijeron "esto es como Operación Triunfo, pero del humor y duermes en tu casa". Me cogieron y la productora, que también hacía el "Supermartes" me dio entrada también allí. Estaba Fran Hermida, que era un monologuista y el responsable de que yo esté en esto. Me dijo que fuera a hacer monólogos con él, cosa que yo no había hecho nunca y a raíz de eso vino toda la madeja.
¿Y llegaste por guapo o por chistoso?
"Me presenté al concurso de Míster Galicia y me dieron el título de Míster Simpatía"
Pues no lo sé, porque de hecho era una cosa que yo no pensaba. Una vez me presenté al concurso de Míster Galicia y me dieron el título de Míster Simpatía. Ya hay que ser desgraciado para ir a un concurso de belleza y que te digan que eres simpático. Entonces yo fui a esto del Rei da Comedia y allí me trataban de guapo.
Lo del título de Míster Simpatía supongo que es como cuando quieres ligar con una chica y te dice que le gustas como amigo.
Ahí, ahí. Cuando pasa eso está todo perdido. Pues yo estaba en esa situación, más o menos.
Bueno, pero no salió tan mal, y de la TVG el salto a la televisión, a las cadenas nacionales, ¿cómo fue?
Pues fue en el 2008, que no tenía nada que hacer en Galicia y me dije, pues voy a probar a ver qué es eso de trabajar en Madrid. Hice otro casting, también en Galicia y me llamaron de la productora Globomedia, que me querían coger. Fui a Madrid y me dijeron, que te quedas. Estuve un año grabando "El Club del Chiste", que fue una experiencia maravillosa.
Pero tú como el famoso anuncio del turrón, ya que estamos en estas fechas, siempre vuelves a casa.
"En Madrid no vivo, en Madrid trabajo. Vivir vivo en Pontevedra, y eso que no soy PTV, pero soy un enamorado de esta ciudad"
Sí, bueno. Yo siempre digo que en Madrid no vivo, en Madrid trabajo. Vivir vivo en Pontevedra, y eso que no soy PTV, como se suele decir, pero sí que soy un enamorado de esta ciudad. Pontevedra me parece un sitio maravilloso para vivir y mientras pueda aquí seguiré, voy allá a trabajar pero en cuanto acabo aquí otra vez.
Y ahora mismo, proyectos nuevos a las puertas.
Pues espero hacer muchas cosas. Digamos que tengo los huevos repartidos por varias cestas. Lo más inmediato, y es una primicia, es que el 17 de diciembre se estrena una serie que grabé para Cuatro Televisión, que se titula "Gym Tony", en la que hago un personaje que estoy encantado con él, porque tengo que hacer de tonto y eso me sale muy bien, la verdad es que me sale muy natural. Es una serie de humor, de capítulos cortitos y creo que a la gente le va a gustar mucho, porque con que se rían la mitad de lo que nos reímos nosotros haciéndola, será un éxito. Después tengo otra serie de la que aún no puedo decir nada, porque todavía no hay fechas, en la que también tengo un personaje fijo, para Telecinco, que la idea inicial es que se estrene en enero. Además sigo con mis monólogos.
"El 17 de diciembre se estrena una serie para Cuatro, que se titula "Gym Tony". Hago un personaje que estoy encantado con él, porque tengo que hacer de parvo y eso me sale muy natural"
Circuito de bares y teatros ¿no?
Efectivamente. Realmente yo si tuviera que decir lo que soy, sería monologuista, que es lo que hago la mayor parte del tiempo.
Es agradecido, ¿no? Aunque algunos puedan pensar que actuar en bares es bajar un escalón, la cercanía con el público lo compensa. Es como para un músico hacer un concierto acústico.
No es bajar, en absoluto. Puede que en algún sitio sí, pero en el norte, y sobre todo en Galicia, no. Aquí y también en Cataluña, el público tiene mucha capacidad de escuchar y eso hace que tú en un bar seas capaz de crear un ambiente como en un teatro, pero con la diferencia de que puedes ser un poco más gamberro, con la gente más próxima y más libertad. A mí dar el salto a nivel nacional lo que me ha traído es la posibilidad de escoger un poco más los escenarios dónde actuar y los teatros son sitios maravillosos para eso, pero sí que es verdad que para nuestro trabajo, yo actué en teatros para 1.600 personas, pero para lo nuestro no es lo mejor, es muy bonito, pero nosotros no somos estrellas del rock. Nosotros trabajamos con el gesto y la palabra y eso en un escenario muy grande se pierde un poco. Yo en Galicia sigo haciendo bares, algunos porque ya son amigos, me han apoyado desde el principio, y de vez en cuando sigo haciendo esas gamberradas porque es muy divertido, se pasa muy bien y es refrescante, la verdad.
¿Eres tu propio guionista o simplemente te limitas a actuar interpretando lo que te escriben otros?
Soy mi propio guionista, aunque soy un guionista muy vago y me cuesta mucho escribir. Tengo textos que van conmigo constantemente y otros que los cambio. Es como un arbol, el tronco más o menos está claro, pero hay ramas que vas recortando mientras nacen otras nuevas.
¿Y dónde queda la improvisación del monologuista?
No. Improvisación no puede haber. Eso es una leyenda urbana. Yo juego con la improvisación, pero es una improvisación controlada. Si estás una hora y media o dos horas en un espectáculo hablando seguido tú sólo, tienes que tener muy controlado el ritmo del espectáculo, porque si no lo controlas seguramente el espectáculo será un fracaso. Sí que hay ciertos juegos de improvisación, pero la tienes controlada. Tu planteas ciertos juegos sabiendo las posibles respuestas, no sabes cuál de las tres van a ser, pero sí una de esas tres. Se trata un poco de eso, dar la sensación, que la gente sienta que estás con ellos y que esa situación es única. Yo me divierto con ellos, con lo que les cuento y si yo lo paso bien supongo que alguno de los que me están escuchando también lo hará.
"Ahora ya casi no se firman autógrafos, selfies todo el día. Las compañías de teléfonos tienen que añadir dos botones. Uno es el de "por si acaso" y el otro el de Selfie Nicolás""
Nos está saliendo una entrevista muy seria, así que vamos a terminar con dos cosas algo más ligeras, como corresponde. Yo entiendo que ahora, con las nuevas tecnologías y las modas también, los famosos ya casi no firmáis autógrafos pero sí que hacéis muchos selfies.
Sí, sí. Selfies todo el día. Tanto que desde aquí les digo a las compañías de teléfonos que tienen que añadir dos botones a los terminales. Uno es el de "por si acaso", porque todo el mundo te hace una foto y dice "otra, por si acaso". Y digo yo, por si acaso qué, ¿a ver si salimos guapos en la segunda?, pues vamos a salir igual que en la primera. Y el otro botón tiene que ser el de "Selfie Nicolás", de tal manera que así como hagamos la foto salga Nicolás de fondo, porque si no sale Nicolás no eres nadie.
Y la última no puede ser otra que pedirte que nos cuentes el último chiste (por ahora) de David Amor.
Buff. La verdad es que estos días con lo de Nicolás está todo copado. A ver. Es de una señora que entra en una farmacia y le dice al farmacéutico: ¿puede usted venderme arsénico, por favor? Pero cómo que arsénico si eso es un veneno, le dice el farmacéutico. Sí, es para matar a mi marido, le responde la señora. Pero cómo voy a darle eso para matar a su marido. Entonces la señora le enseña una foto del marido y el farmacéutico le dice, ah, bueno, no sabía que traía usted la receta.