El colectivo A Nova Terra ha alertado del "estado de abandono" en el que se encuentra el carballo de Santa Margarita, en Mourente, y culpa de ello a la Archidiócesis de Santiago de Compostela, "como propietaria del recinto", y a las administraciones con competencia sobre el patrimonio natural, Xunta y Concello de Pontevedra porque "consintenlle a desfeita á Igrexa".
La situación del carballo ha sido puesta en conocimiento, ante el Concello, la Xunta, los ministerios de Medio Ambiente y Cultura, la Agencia Europea de Medio Ambiente, el Defensor del Pueblo y la Valedora do Pobo.
El Defensor del Pueblo "dalle un tirón de orellas" al Ministerio de Cultura en relación con el rechazo a tramitar la denuncia de A Nova Terra "por ir escrita en idioma galego" y señala la "conducta incorrecta" por parte de la Subdirección General de Patrimonio Histórico.
Por su parte, la Valedora do Pobo admitió a trámite la queja y recientemente informó a este colectivo de las contestaciones recibidas do Concello de Pontevedra e da Consellería de Medio Ambiente.
Tanto el Concello como la Consellería dejan claro que el terreno y la responsabilidad de cuidado del carballo es de la Archidiócesis de Santiago de Compostela. En este sentido para A Nova Terra "non se entende como as administracións competentes consintenlle a desfeita á Igrexa" y que el Concello de Pontevedra anunciase una inversión de 240.000 euros "o que suporía o desvio de fondos públicos para actuacións que lle correspondería financiar á Igrexa".
Además critican que el gobierno local "non fai capaz de adoptar ningunha medida preventiva, como a de prohibición de aparcamento de vehiculos no recinto do carballo nin de obrigar o propietario a coidalo".