El talud derribado la pasada semana por el temporal Aitor en la senda del Lérez está ya en vías de reparación. El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, firmó el miércoles un decreto para iniciar la tramitación de las obras de emergencia necesarias para la reparación.
Lores dio cuenta de este decreto en la Xunta de Goberno e insistió en la agilidad de la actuación municipal en este caso, pues "en tiempo récord" ya se dieron las órdenes pertinentes "para evitar males mayores".
El talud resultó afectado por las fuertes lluvias de la madrugada del jueves 26 de septiembre y, al derribarse, los vertidos llegaron al Lérez y resultó afectado al colector de aguas residuales.
"Afortunadamente", señaló Lores, no afectó al colector de abastecimiento de agua de la zona norte de Pontevedra, que también llega hasta el polígono industrial de O Campiño. Pero la situación actual del talud implica que "sigue habiendo riesgo" de afectar a ese colector en caso de que llegue otro temporal o no se repare.
Ante este "riesgo", que supondría afectar al abastecimiento de "miles de personas", se decidió esta actuación de emergencia.
El Concello estima que las actuaciones supondrán un gasto aproximado de 465.850 euros, 42.000 para una consultoría técnica y el resto para las obras en sí.
La consultoría técnica la va a realizar la empresa Enmacosa, que realiza ya un estudio previo de cómo está estabilizado el terreno para saber como actuar.
Las obras las va a realizar E.C. Casas bajo la supervisión técnica de Enmacosa y va a suponer la estabilización del talud.