El grupo municipal del Bloque Nacionalista Galego de Sanxenxo se hace eco de la "confusión" que está generando entre vecindario y visitantes la "escasez de señalización" en el tramo de la Avenida de Madrid afectado por la reforma acometida en el Paseo de Silgar, hasta la subida a la Rúa Cesteiros.
Tal y como advierten los nacionalistas, la actuación conllevó la supresión de varias plazas de estacionamiento temporal, destinadas a servicios y a carga y descarga, "sin que el gobierno municipal aportase ningún tipo de información al respecto".
Asegurán que este hecho, sumado al "reducido número de señales verticales", provoca que varios conductores fueran ya multados por la Policía Local por dejar sus vehículos en los espacios en los que antes estaban dichas plazas, en lugares como en la entrada al consistorio o en las inmediaciones de la Praza do Pazo.
El BNG defiende las actuaciones encaminadas a dar preferencia a la seguridad peatonal, así como la movilidad y accesibilidad universal, pero quiere "dejar patente el malestar que está provocando esta ausencia de señalización por parte del Concello".
El portavoz local del BNG, Fran Leiro dirige sus críticas directamente al alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín al que pide que aclare "se esta carencia é froito da súa incapacidade de xestión ou se existe pola súa parte un afán recadatorio".
La reforma de este tramo del Paseo de Silgar y de la Avenida de Madrid remató hace seis meses.
Se reabrió el tráfico en junio "y desaparecieron las plazas de servicio y carga y descarga y mucha gente aun no sabe si puede parar en las mismas zonas para hacer alguna gestión rápida", indican.
El BNG también destaca que la única señal que hace referencia explícita a ese tramo como zona de preferencia peatonal está en la Avenida de Madrid, pasando la playa de A Panadeira.