Francisco Conde, vicepresidente económico y conselleiro de Economía, Empresa e Innovación, lamentaba este miércoles en el Parlamento de Galicia la actitud que mantienen el Gobierno del Estado y el Concello de Pontevedra al entender que no asumen su responsabilidad de buscar una solución para los trabajadores de la fábrica pastera de Ence situada en Lourizán.
El representante del gobierno autonómico afirmó en la sede parlamentaria que "seguiremos colaborando na busca dunha alternativa desde a legalidade para que Ence permaneza en Lourizán".
Citó el encuentro mantenido con representantes sindicales de los trabajadores durante el lunes a los que trasladó el compromiso de apoyar la propuesta de que la fábrica pase a formar parte del suelo de la Autoridad Portuaria de Marín, al haber manifestado la empresa que no existe una localización alternativa posible.
El conselleiro confirmó que la propuesta se trasladará al Consello Consultivo de Galicia y después comunicarán el resultado de la consulta al Gobierno para que contemple esa posibilidad y se estudie en la próxima mesa de diálogo sobre el futuro de Ence.
Francisco Conde insistió en que de la continuidad de la fábrica en la ría pontevedresa dependen más de 5.000 empleos directos e indirectos, más de 1.800 pemes y autónomos proveedores de madera y más de 450 millones de euros en aportaciones al Producto Interior Bruto de Galicia. Alegó que no hay razón que justifique una transición ecológica sin industria y sin empleo en Galicia.
PROTESTA DE LOS TRABAJADORES
Personal de Ence se acercaba este miércoles hasta la Illa da Toxa donde se celebra el Foro en el que participaba, durante la tarde, la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, y al que asistía también el rey Felipe VI y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, entre otras autoridades.
Los trabajadores tanto de la fábrica como de empresas auxiliares se concentraron en la entrada del puente de A Illa da Toxa para dar visibilidad a su problema laboral ante las autoridades asistentes a este evento.