Comisiones Obreras propone a las administraciones públicas, una "apuesta decidida" por las plantas de biomasa como una de las medidas para acabar con los incendios forestales, transformando la materia vegetal procedente del desbroce de maleza en energía.
"Para poder hacer estos trabajos es necesario tener personal con vínculo permanente", añade el secretario comarcal de Comisiones Obreras en Pontevedra, José Ramón Piñeiro, en el convencimiento de que "esta propuesta de actuación serviría para salvar vidas y evitaría la pérdida de cantidad de riqueza forestal ".
Este sindicato apunta que para llevar a cabo con éxito su idea es necesaria la coordinación de los gobiernos central, autonómico y provincial. El proyecto requeriría "contratar un número de personas equivalentes a seis veces las que se contratan para apagar los fuegos en verano". Según Piñeiro, su trabajo consistiría en replantar, desbrozar y limpiar maleza que trasladaría a las plantas de biomasa.
"Lo que tenemos ahora no sirve", concluye el secretario comarcal de Comisiones Obreras, "y por esa razón proponemos trabajar todo el año para que no esté en peligro nuestra riqueza forestal".
Añade José Ramón Piñeiro que la "gran ventaja" de esta propuesta es que se crearía puestos de trabajo "estables y con derechos" que además "se pagan solos con el ahorro que se produce".
La propuesta de CC.OO. "se tiene que complementar implicando y responsabilizando a los propietarios de las parcelas y a las comunidades de montes" garantizando la repoblación y su limpieza.
Para ello, dice este sindicato, se dictarán normas de obligado cumplimiento para que en un radio de 25 metros de las casas estén limpias de maleza por cuenta de los propietarios de las fincas, y si éstos no lo hacen, lo acometerá el personal contratado por el concello, pasándosele luego el cobro una vez hecho el desbroce. A las comunidades de montes se les cobrará una cantidad que estará en función de la extensión territorial de las mismas lo mismo ocurrirá con las parcelas particulares. Si el desbroce se lleva a cabo en los períodos estipulados y llevan los restos a la planta de biomasa más próxima no tendrían que pagar nada por ello, abonándoseles una cantidad por tonelada o parte proporcional, corriendo el gasto del transporte por cuenta de la administración.