En la noche del lunes al martes, los ladrones entraron en las galerías Oliva. Forzaron el acceso a la cafetería Delicious Bakery para intentar llevarse la recaudación, pero se fueron con las manos vacías porque nunca guardan dinero en el local. Todo se quedó, en palabras de su propietaria, en "un susto", pero, para esta zona comercial de Pontevedra fue mucho más. Fue la gota que colmo el vaso de la paciencia de vecinos y comerciantes.
Justo el lunes, habían comentado que les parecía interesante la iniciativa puesta en marcha por vecinos y comerciantes del entorno de A Ferrería para recoger firmas por la inseguridad de la zona y que deberían hacer algo simular. Este martes, cuando amanecieron con la noticia del robo, decidieron que lo harían.
Han decidido dar el paso porque, desde hace tiempo, un grupo de personas se sitúa durante la noche en las entradas de las galerías, en la zona en la que no hay verja para permitir el acceso a las viviendas, y generan situaciones de falta de seguridad y limpieza.
"Lo único que hacen es defecar, mear, tirarse, ensuciar, hacen escombreras, no tiran nada a la basura", relata Antonio Santiago, presidente de la asociación, que asegura que esas personas sin techo duermen en los accesos y "se portan muy mal" y demuestran que "son bastante guarros".
Desde primera hora de este martes, los negocios de las galerías empezaron a recoger firmas solicitando, en nombre de la asociación de comerciantes de las galerías, la intervención de los servicios sociales, la Policía y los servicios de limpieza y jardinería "para terminar con los problemas de inseguridad, suciedad y desorden público en la zona".
Antonio Santiago explicó este martes que hicieron suya la iniciativa de A Ferrería porque "aquí estamos sufriendo también estos percances" y la respuesta está siendo muy buena entre los 56 asociados. "Están todos muy contentos para mover un poquito esto y que se nos haga un poco caso", explica.
No dirigen su petición a ninguna persona en particular, sino que a "quién puede solventar estos problemas". Así, piden: "el que pueda hacer algo, por favor, que nos hagan un poco de caso".
Aunque surge de los comerciantes, han extendido la iniciativa también a los vecinos, que sufren la misma situación que ellos, y buscan lograr gran apoyo para poder llevar su caso ante el Concello de Pontevedra. Lo hacen desde la unió. "Aquí estamos todos a una, somos una piña".
Piden "simplemente que no dejen asentarse a este tipo de gente por aquí" porque se cobijan en las entradas y, por ejemplo, dejan todo manchado de comida. "Abren las latas de conserva y ni las comen, las vacían. Latas de cerveza, botellas de vino... dejan todo tirado por los suelos, no recogen nada".
Además, cuando los vecinos les llaman la atención, se enfrentan a ellos, en especial, a las mujeres. "Las vecinas hasta le tienen miedo porque les hacen frente. Si eres mujer, te hacen frente, no se cortan nada en discutir y levantar la mano", explica Antonio Santiago.
Los perjudicados son los vecinos y comerciantes y también las personas que dedican a la limpieza, que "lo están pasando bastante mal" a pesar de que todos les echan una mano. "Incluso vomitan cuando van a recoger", indica el presidente de los comerciantes.
ENCUENTRO DE PALILLEIRAS
Desde esta asociación de comerciantes intentan dinamizar las galerías y que no se mueran tras el cierre de la parte que daba a la calle Gutiérrez Mellado ni a causa de estos problemas. Dentro de su programación de actividades, el próximo sábado, 23 de marzo, de 10 a 14 horas, organizan su II Encuentro de Palilleiras.
Alrededor de 200 palilleiras de toda Galicia se citarán en las galerías para mostrar su forma de trabajar e invitan a toda la ciudadanía a que se pase a disfrutar del evento.