En Caldas demandan a la Xunta firmar ya el convenio para el nuevo centro de salud

Umia
23 de enero 2025

El BNG alerta de una demora injustificada para que se construya el nuevo centro médico. Manuel Fariña, teniente de alcalde, critica que la Xunta no haya destinado una partida específica para este espacio en los presupuestos de 2025

Centro de salud de Caldas
Centro de salud de Caldas / Concello de Caldas de Reis

El Bloque Nacionalista Galego de Caldas de Reis denuncia lo que entienden que es una demora "inxustificada" en la firma del convenio para la construcción del nuevo centro médico de la villa termal.

Indican que hace un año que el Concello aprobó el borrador del texto y había acordado con la Consellería de Sanidade la cesión y urbanización de los terrenos necesarios para la obra.

El teniente de alcalde y portavoz nacionalista, Manuel Fariña, se muestra especialmente crítico con la ausencia de una partida específica en los presupuestos autonómicos de 2025 para esta infraestructura sanitaria.

"Non ten sentido agardar máis cando está en xogo a saúde dos veciños caldenses", afirma Fariña, quien considera que la licitación de las obras debería realizarse en este primer trimestre del año.

"Está todo listo para asinar e a obra é unha prioridade absoluta para nós como Concello. Agora a Xunta ten que demostrar o seu compromiso con Caldas de Reis e dar o empurrón final", subraya el edil nacionalista, quien lamenta que "as boas palabras non se concreten en feitos".

El BNG también denuncia el rechazo por parte del PP de todas las enmiendas presentadas sobre Caldas en los presupuestos autonómicos, no solo en relación al centro de salud, sino también para la mejora y saneamiento del río Umia.

En este sentido, los nacionalistas demandan un Plan Integral para la mejora ambiental de la cuenca, que incluya la evaluación de la posible demolición del embalse, actualmente fuente de problemas de contaminación por cianobacterias.

Entre otras actuaciones pendientes, el BNG reclama la recuperación de las playas fluviales, el dique y el entorno de la fábrica de la luz, así como la limpieza general de la ribera y la eliminación de la planta invasora Egeria Densa, con el objetivo de devolver al Umia su estado natural.

Fariña critica además que el gobierno de Alfonso Rueda no muestre "empatía algunha" con las necesidades de la villa termal, atendiendo solo "a contagotas" reclamaciones históricas como la reforma del instituto, una obra que, según el edil, "vai a pedais".