"Cada vez pregúntannos máis como teñen que facer para retornar a Ucraína", apunta Marta Lamas, trabajadora social de Cruz Roja que junto la intérprete Anastasia Levchenko, ucraniana con residencia en Galicia desde hace una década y voluntaria de Cruz Roja, están al frente de la oficina móvil de información para refugiados.
Desde este lunes se encuentra en Pontevedra esta la unidad móvil. Se trata de una furgoneta que ya recorrió otras ciudades gallegas y localidades con una mayor población de refugiados procedentes de Ucrania, para ofrecer información, asesoramiento y ayuda a la población ucraniana afincada en la ciudad y en los municipios de la comarca.
El Gobierno gallego, con la colaboración de Cruz Roja, puso en marcha esta iniciativa para atender a las personas que llegaron a nuestra comunidad huyendo de la guerra de Ucrania.
Estas personas refugiadas resuelven aquí todas sus dudas sobre el sistema de protección temporal, sobre qué pueden hacer si necesitan alojamiento, manutención o ayudas económicas, si tienen derecho a residencia y permiso de trabajo o cómo acceder al sistema sanitario, o qué hacen si ya se encontraban en Galicia antes del conflicto.
"Preguntan tamén moito sobre clases de español, procura de emprego, prestacións sociais", explica Marta Lamas. El perfil mayoritario de las personas que acuden a este punto de información "son mulleres de mediana idade e con nivel de estudos superiores e tamén en moitos casos vén cos seus fillos ou con nenos pequenos e adolescentes".
El idioma es uno de los principales obstáculos para la integración, y una barrera para encontrar un trabajo, pero la escolarización de los menores ha empezado a allanar ese camino.
Anastasia Levchenko comenta que cuando los refugiados pueden hablar con ella en su propio idioma "se tranquilizan porque les explico con más detalles y también les hago entender algunos aspectos culturales que son bastante distintos" en Galicia respecto a Ucrania. Por ejemplo, "el clima es distinto, y la lluvia les choca y al principio les costaba".
Desde el inicio de la crisis humanitaria provocada por la invasión rusa de Ucrania regularizado su situación en esta comunidad 2.323 desplazados, según los últimos datos de la Delegación del Gobierno ofrecidos este lunes por el director xeral de Inclusión Social de la Xunta, Arturo Parrado.
La regularización de la acogida a través de los permisos de protección temporal incluye la atención educativa y son ya 702 niños y niñas ucranianos escolarizados en 258 colegios e institutos de Galicia. En el caso de Pontevedra, son 203 los niños y adolescentes que ya ocupan un pupitre en alguno de los 82 centros de la provincia con desplazados escolarizados. La mayoría, en escuelas de Infantil y Primaria.
En cuanto a la atención sanitaria, apuntó Parrado, "están xa tramitadas 2.004 tarxetas sanitarias e son 480 os recoñecementos realizados polo Sergas no centro que teñen en Santiago para aquelas persoas que necesitan unha atención máis individualizada ou vacinación".
El director xeral de Inclusión Social visitó este lunes la oficina móvil de información acompañado por el delegado de la Xunta en Pontevedra, Luis López Diéguez, y por la presidenta de Cruz Vermella Galicia, Carmen Colmeiro.
El servicio permanece emplazado de 9.00 a 14.00 horas frente al Edificio Administrativo de la Xunta, en la rúa Espincelo.