Técnicos del Centro de Investigaciones Forestales de Lourizán junto con un equipo del Instituto de Investigaciones Agrobiológicas de Galicia (CSIC) en colaboración con edafólogos de la Universidade de Santiago aplicarán esta semana en Ponte Caldelas un tratamiento a base de paja de trigo para evitar la erosión y las riadas tras los incendios de este verano.
La previsión meteorológica permitirá a los helicópteros sobrevolar en buenas condiciones las superficies arrasadas por el fuego para lanzar la paja de trigo. Esta misma técnica, conocida como ⿿air mulching⿿ también se está aplicando en el monte Pindo y en Porto do Son.
Antes del trabajo de los helicópteros varios equipos de la empresa pública Seaga acondicionaron el terreno para garantizar el éxito de la operación aérea.
En este tipo de tratamientos Galicia fue pionera en 2006, año en el que se diseñó, si bien no fue hasta el 2010 cuando se probó por primera vez en Laza.