El Concello de Pontevedra aprobó este lunes la modificación puntual del PGOU que regulará la instalación de crematorios en la ciudad. Lo hizo con los votos favorables de los catorce miembros de los grupos municipales de BNG y PSdeG-PSOE y la oposición de los nueve ediles del PP. La concejala no adscrita, María Biempica, se abstuvo. La aprobación se produjo entre los gritos de los miembros de la plataforma Non Crematorios Pontevedra Leste.
Con esta iniciativa, defendida en el Pleno por el concejal socialista Agustín Fernández, en líneas generales supondrá que los crematorios no podrán instalarse en suelo residencial (ni a una distancia cautelar de 50 metros de los suelos urbanos, urbanizables o de núcleo rural) y quedan autorizados en suelo rústico (previa aprobación de un Plan Especial de Infraestructuras y Dotaciones), cementerios y polígonos industriales.
Una vez que el Pleno ha aprobado la iniciativa, el expediente será remitido a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, para que proceda a la aprobación definitiva, que le compete en exclusiva, antes de un plazo de tres meses.
El portavoz del Partido Popular, Jacobo Moreira, se puso de lado de los vecinos de A Parda y criticó el "tremendo engaño" del gobierno municipal a los afectados. Asegura que se aprobó con "nocturnidad y alevosía" reducir la franja de protección de 500 a 50 metros, lo que supone una "sentencia condenatoria" para todos los vecinos del barrio. Es un "atropello", reiteró, y lamentó la "seria amenaza" que se cierne sobre todos los afectados.
Durante el debate de este punto del orden del día fueron continuas las interrupciones por parte de los miembros de la plataforma Non Crematorios Pontevedra Leste, que llegaron a llamar "casta" a los concejales de BNG y PSdeG-PSOE. "Esto no va a quedar así", afirmó uno de los portavoces, en referencia a la próxima convocatoria de las elecciones municipales. "Ya os queda poco en el gobierno", avisaron los afectados.