Las estaciones de ferrocarril de Pontevedra y Vilagarcía fueron este sábado dos de los puntos de Galicia en el que colectivos de ciclistas y ecologistas cumplimentaron decenas de hojas de reclamaciones y desplegaron pancartas para pedir a Renfe que facilite la intermodalidade bici-tren.
Decenas de personas acudieron con sus bicicletas a las taquillas de estaciones ferroviarias del Eje Atlántico para exigirle a la compañía poder transportar sin dificultades sus bicicletas y así usarlas después en las ciudades de destino. Fue una acción coordinada a la misma hora en las estaciones de A Coruña, Compostela, Vilagarcía, Pontevedra y Vigo-Urzáiz.
Se sumaron a las protestas los colectivos A Golpe de Pedal, Arousa en Bici, Composcleta, Conbici, Ecologistas en Acción, Greenpeace, Mobi-liza, Mujeres Bicivisíbeis, Pedaladas, Verdegaia y Vigo Ciclábel.
Las personas participantes cubrieron docenas de hojas de reclamaciones en las que pidieron a Renfe que permita llevar más bicicletas en los trenes y que no cobre suplemento por trayecto y mostraron pancartas con el mensaje "Bici en el Tren Ya!".
Según los colectivos, en Galicia la intermodalidad entre el tren y la bicicleta es "casi un tinglado". La ausencia de trenes de cercanías hace que los recorridos por el Eje Atlántico solo se puedan hacer en trenes de Media Distancia ( Avant, MD y Regionales) y acusan a Renfe de poner "demasiadas dificultades" para que en este tipo de trenes, al contrario que sucede en los de cercanías de otros lugares del Estado, las personas puedan desplazarse con su bicicleta para después emplearla como medio de transporte sostenible en el destino. En los trenes regionales y MD gallegos la compañía solo permite subir tres bicicletas por trayecto completo y cobra un suplemento cuando los trayectos son de más de 100 kilómetros.
Así, por ejemplo, una familia o un grupo de más de tres personas no puede llevar sus bicicletas en el mismo tren, tan sólo "si tiene la suerte de que alguien que viaja en la misma línea no hayan cogido antes los tres billetes".
En las reclamaciones presentadas a Renfe insistieron en cuatro puntos fundamentales: que procure una solución para no limitar el número de bicis en un tren a solo tres por trayecto; que se permita subir bicicletas sin plegar en los trenes Avant; que el coste por llevar la bici en el tren sea gratuito, independientemente del número de kilómetros que se recorran; y que Renfe sea consecuente con su campaña 'Tren y Bici para la movilidad urbana' en los trenes de MD en Galicia, ya que no se dispone de un servicio de cercanías y esto crea una discriminación con las viajeras y viajeros gallegos.