Ni siquiera el frío pudo con los vecinos de Vilaboa que este sábado volvieron a marchar por los arcenes de la carretera Nacional 550 para insistir en su rechazo a la construcción de la subestación eléctrica en la parroquia de Bértola.
Los vecinos están citados para este martes en la Subdelegación del Gobierno con los responsables del Ministerio de Fomento para hablar de una ubicación alternativa para la infraestructura, alejada de las viviendas tal como reclaman.
El portavoz de este colectivo, Emilio Juncal, informó que a dicha reunión acudirán representantes de la comunidad de montes, portavoces vecinales y miembros del equipo de gobierno del Concello de Vilaboa, además de responsables de la Xunta de Galicia.
Este portavoz trasladó la esperanza de los afectados de que salga una alternativa que satisfaga a todas las partes de esta reunión.
Mientras tanto siguen apilando leña en la improvisada caseta que han instalado junto a los terrenos donde se proyectó la subestación. Allí llevan más de tres meses haciendo turnos de guardia para evitar que los trabajos comiencen.