La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade en funciones, Ethel Vázquez, mantuvo este lunes una reunión con el alcalde de Barro, Xosé Manuel Fernández Abraldes, en la que abordaron diferentes asuntos y coincidieron en la necesidad de conocer la solución definitiva de la autovía estatal A-57 a su paso por este municipio y sus implicaciones sobre el tráfico de la carretera autonómica.
En la reunión también hablaron de la seguridad vial en el tramo antiguo de la carretera PO-531, entre la iglesia de Curro y el acceso al polígono de Outeda. Se trata de un tramo de unos 500 metros de longitud en el que los movimientos se redujeron de manera significativa cuando se puso en servicio la variante y que registra un tráfico fundamentalmente de carácter local.
Se acordó que la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, analizará la adopción de posibles medidas de calmado de tráfico en este tramo de carretera, como la ejecución de algún paso sobreelevado, al tiempo que mostró su disposición a transferirlo al ámbito campo local, porque esto permitirá adoptar medidas más acordes a su funcionalidad actual.
Durante la reunión, Ethel Vázquez trasladó que la prioridad de actuación ahora mismo por parte de la Xunta en materia de carreteras en concello de Barro se centra en la carretera PO-531, que une Pontevedra y Vilagarcía de Arousa, y registra una alta intensidad de tráfico.
Recordó que en esta vía ya se llevó a cabo la mejora de la seguridad vial en la zona de accesos al polígono de Sequeiros y, más reciéntemente, también en A Devesa, con una inversión global que se aproxima al millón de euros. Avanzó, además, que la Xunta tiene previstas nuevas actuaciones de cara a reforzar la seguridad viaria y fomentar la movilidad peatonal y ciclista en esta carretera autonómica.
La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade también ofreció el apoyo de la Xunta al Concello de Barro en el desarrollo de sus competencias municipales de saneamiento y depuración.
En este sentido, Ethel Vázquez trasladó la disposición del gobierno gallego de cofinanciar la mejora de la depuradora de Barro, en el marco de un acuerdo con la Deputación de Pontevedra y con el Concello, para el proyecto y para las obras, financiándolas entre las tres administraciones.