La propuesta de Audasa -pendiente de ser aprobada por el Gobierno- de subir el precio de los peajes en la autopista AP-9 en más de un 9% a partir del próximo 1 de enerose ha dado de bruces con el rechazo unánime de ciudadanos y autoridades pontevedresas.
Los últimos en pronunciarse al respecto, este mismo jueves, han sido el alcalde de Pontevedra y la presidenta de la Deputación, Miguel Anxo Fernández Lores y Carmela Silva, que han coincidido en señalar que la pretensión de la compañía resulta "intolerable".
Tras recordar que la AP-9 ya se encuentra entre las vías de alta capacidad más caras de todo el Estado español, Silva ha sostenido que Audasa "pode plantexar o que lle pareza", pero confía en que desde el ámbito político "non se atenda" esta reclamación.
"Reclamamos que non se suba a peaxe porque sabemos o custo que supón para os cidadáns", ha subrayado la presidenta provincial, que ha querido recordar que los responsables de haber llegado a esta situación "teñen nomes e apelidos".
Así, ha subrayado que fue el PP, con José María Aznar como presidente, quien alargó la concesión de la AP-9 hasta el año 2048. Sin esa extensión, ha afirmado Carmela Silva, la autopista gallega "xa sería totalmente pública e gratuíta".
De ahí que Silva haya añadido que le sorprende que los populares enarbolen ahora la "bandeira das reclamacións" sobre las condiciones de esta autopista. "Hai que facer memoria porque sen historia non hai verdade", ha sentenciado.
El alcalde de Pontevedra, por su parte, ha reiterado que la AP-9 está "amortizada" tras tantos años de peaje, por lo que considera que es un "atraco a man armada" que se plantee una nueva subida. Exige al Gobierno que no "perpetue" esta situación.