Aumentan los casos de agresiones y bajas del personal por el confinamiento en el centro de menores de Pontevedra

Pontevedra
09 de mayo 2020

UGT denuncia que el abandono de la consellería de Política Social durante el estado de alarma desembocó en una situación insostenible y exige la adopción de las medidas que rechazaron tras el estallido de la pandemia

Centro de menores Avelino Montero Mónica Patxot

UGT Pontevedra denuncia la situación de desatención en la que se encuentra el centro de menores Avelino Montero de Pontevedra.

Desde el sindicato acusan a la Consellería de Política Social abandonar su misión de buscar alternativas al confinamiento a los jóvenes que en el momento en el que se decretó el estado de alarma se encontraban internados en este centro, que tiene un régimen abierto o semiabierto y sus instalaciones y programas están diseñados para la aplicación de este tipo de medidas.

Por ello, el 16 de marzo un grupo de trabajadores de esta institución remitieron una carta a la Dirección Xeral poniendo de manifiesto la situación que iban a tener que afrontar los menores pidiendo un plan de acción para minimizar los conflictos, las deficiencias del centro y abordar un trabajo reeducativo de calidad.Sin embargo, dos días después la consellería rechazó todas las peticiones "sin presentación de ninguna alternativa, solo confinamiento", denuncian desde el sindicato.

Casi dos meses después, desde el centro aseguran que están sufriendo la mayor escalada de "incidentes especiales" dentro del centro que se recuerda desde su creación. El número de personas con estrés laboral y de baja supera el 50% y el deterioro de las instalaciones, agresiones, amenazas, violencia y roturas en el mobiliario y en las infraestructuras son sucesos que están sucediendo cotidianamente, alertan.

"No solo afecta al personal, también está poniendo en cuestión la seguridad de los propios internos", subrayan.

Tampoco está siendo adecuada la aplicación de protocolos de detección de la Covid-19 entre el personal y usuarios del centro, denuncian.

Por todo ello exigen una intervención inmediata por parte de la Consellería de Política Social para garantizar la correcta aplicación de las normas del centro así como tomar las decisiones necesarias para subsanar el confinamiento indefinido con intervenciones individualizadas reeducadoras y la búsqueda de alternativas seguras que agredan los ferechos de seguridad tanto de los jóvenes como de los trabajadores.