“As súas reformas, a nosa pobreza”, el canto de la CIG para exigir unas medidas laborales justas

Pontevedra
29 de marzo 2022

La Subdelegación del Gobierno situada en la Plaza de España fue escenario de la concentración de la CIG para demandar unas medidas justas para la clase trabajadora gallega durante la mañana de este 29 de marzo

Concentración de la CIG en defensa de la clase obrera
Concentración de la CIG en defensa de la clase obrera

La Subdelegación del Gobierno situada en la Plaza de España fue escenario de la concentración de la CIG para demandar unas medidas justas para la clase trabajadora gallega durante la mañana de este 29 de marzo.

Con la finalidad de combatir la pobreza, exigen "políticas públicas e salarios dignos" mientras rechazan las medidas externas procedentes de Europa y Estados Unidos mediante protestas en las cuatro provincias.

"O público é servizo, o privado beneficio" repetían en respuesta al plan anticrisis que se está evaluando desde el gobierno de Pedro Sánchez. "Baixar ou rebaixar o prezo sen máis non é a medida" formuló el secretario comarcal de la CIG en Pontevedra, Marcos Conde, "ten que haber empresas públicas e intervencionismo por parte do Estado". 

En referencia la esta actuación del presidente, Conde desaprueba los resultados de los anteriores planes por no ayudar a la clase trabajadora y solo "salvar o capital".

Teme que con el proyecto actual tampoco se propongan reformas laborales justas. Asimismo, solicita un control del precio máximo de la energía y el gasoil, incrementos en los salarios que permitan recuperar el poder adquisitivo y afrontar el IPC en todos los convenios para que sea una cláusula obligada en la negociación colectiva.

Otros delegados del sindicato nacionalista también criticaron la inoperancia del gobierno estatal y autonómico en el ámbito industrial, que destina al país a una "crise que se vai a cronificar cada vez máis". A fin de ejercer presión contra las políticas industriales de Compostela, anunciaron que la CIG saldrá a las calles la próxima semana "e así unha e outra vez" hasta conseguir cambios reales que beneficien al proletariado.