El 21 de diciembre de 2011 la plaza de A Ferrería amanecía víctima de un acto vandálico. Un joven que posteriormente fue identificado por la Policía Nacional tronzó una de las camelias y la dejó herido de muerte.
Un año y cinco meses después, ya puede darse por irrecuperable aquel árbol que llevaba décadas presidiendo la entrada a la plaza desde la puerta de Trabancas. El hueco que ocupaba está ahora ocupado por cemento y piedra.
Igual que aquel 21 de diciembre amaneció la camelia tronzada, este martes 14 de mayo la plaza presentaba una imagen que constata que ya tan solo podrá decirse que allí vivió un árbol, que se ha invalidado el lugar para ser sustituuido por nuevo inquilino al cubrirlo por losas. De momento, además, está cercado por vallas de obra.