Las borrascas Ana y Bruno han convertido a diciembre en el mes más lluvioso del año más seco de la última década, según los registros de Meteogalicia.
El último temporal ha dejado algunas incidencias como bolsas de agua en las carreteras, contenedores movidos, caída de ramas, vallas y señales de tráfico derribadas. A pesar de los continuos chaparrones y sobre todo pese a los intensos vientos, la jornada del martes se saldó sin incidentes destacados.
También Augas de Galicia certifica que en el embalse del Pontillón, que forma parte de la red de abastecimiento de Pontevedra y su ría, se encuentra al 98% de su capacidad total. Y la presa que abastece a Vigo, el embalse de Eiras cuya situación de emergencia está detrás del polémico trasvase desde el río Verdugo, está al 82,8%.
El encoro del Umia se encuentra al 45%, mientras que el de O Con, que suministra agua a Vilagarcía, ronda el 35%.
Para este miércoles Meteogalicia ha activado un aviso con alerta naranja en todo el litoral gallego. Se esperan olas de más de 7 metros. El jueves la alerta cambiará a amarilla. La previsión señala que continuará la inestabilidad y se espera una Nochevieja pasada por agua.