Amplia participación pontevedresa en la manifestación en Compostela contra Altri

Miles de personas inundaron este domingo las calles de Santiago de Compostela para mostrar su rechazo a la instalación de una macroplanta de celulosa en Palas de Rei, en la provincia de Lugo, proyecto desarrollado por Greenfiber, filial de la portuguesa Altri y la gallega Greenalia.

Desde primeras horas de la mañana, cinco autobuses con residentes de Pontevedra, organizados por la Asociación pola Defensa da Ría de Pontevedra, CIG y BNG, se desplazaron a la capital gallega portando una pancarta que rezaba: "Nin Ence na ría, nin Altri na Ulloa. Celulosas fóra!"

Antes del inicio de la marcha, los presidentes de la Plataforma Ulloa Viva, Marta Gontá, y de la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (PDRA), Xaquín Rubido, organizadores de la marcha, denunciaron el modelo industrial de la Xunta, advirtiendo que el proyecto amenaza el corazón natural de Galicia.

Rubido señaló que la Xunta "carece de lexitimidade para impoñer este modelo produtivo" y alertó sobre el impacto en miles de familias de los sectores agroganadero, marinero y turístico.

La manifestación, convocada bajo el lema "A Xunta non pode calar a todo un país. Altri Non!", contó con el apoyo de fuerzas políticas de la oposición, organizaciones sindicales, sociales y ambientalistas.

Entre las consignas más coreadas destacaron "Se é tan boa que a leven á Moncloa" y "Rueda, recula, a auga non é túa".

La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, presente en la movilización, exigió al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, "que pare esta agresión, esta bomba ambiental que é unha hipoteca para o futuro do noso país".

Por su parte, Altri defiende en un comunicado su proyecto, aún pendiente de autorización técnica, lamentando la "percepción negativa" de parte de la sociedad y asegurando que el diseño cumple "cos máis altos criterios de sustentabilidade, circularidade e respecto ao medio ambiente" exigidos por la normativa europea.

La manifestación, que según los convocantes reunió a 100.000 personas, finalizó delante de la sede de la Xunta de Galicia, donde los manifestantes corearon "Altri non" en un ambiente festivo y reivindicativo sin incidencias.