La corporación municipal de O Grove ha reducido a un único punto la sesión plenaria celebrada en la tarde del lunes tras la irrupción de un grupo de de treinta afectados por las preferentes que interrumpieron el pleno apenas había dado comienzo.
Con sus habituales camisetas y portando pancartas de denuncia los afectados se concentraron en el salón y empezaron a hacer ruido exigiendo una solución a su problema. En ese momento los concejales del PSOE y de EU, decidieron abandonar el pleno en señal de solidaridad con ellos.
Antes de suspender el pleno el alcalde, Miguel Ángel Pérez, pidió a los manifestantes que le dejasen aprobar un único punto: la firma de un convenio para teleasistencia, del que se pueden beneficiar 17 usuarios de O Grove y que corría peligro si no se aprobaba pronto. No hubo problema. Se aprobó por unanimidad con el apoyo del Bloque. Luego se levantó la sesión.
Una vez finalizado el pleno, que duró poco más de diez minutos, tanto el portavoz socialista, José Antonio Cacabelos como el de Esquerda Unida, Lamelas, criticaron que el Gobierno hubiese optado por mantener el citado punto en el orden del día en lugar de suspenderlo y "visualizar" el apoyo de la corporación local "a unos vecinos que están siendo estafados", destacó el edil socialista.
No se registraron incidentes a la salida de los concejales, precisaron fuentes de la plataforma del Salnés.