La plataforma de afectados por la autovía A-57 en el tramo entre Bora y Xeve pide a los partidos locales "que defiendan su territorio y a sus vecinos" y reclaman a BNG, PSOE y PP "máxima implicación para frenar este trazado de enorme impacto ambiental".
Este colectivo reacciona ante la aprobación del documento técnico sobre el segundo tramo de la A-57, en estas parroquias. Este trámite es la fase previa a licitar la redacción del proyecto, "que será un punto de no retorno en la destrucción de buena parte del rural de Pontevedra", aseguran.
Esta plataforma considera que el trazado propuesto por el ministerio "no beneficia a Pontevedra, responde a intereses nacionales, perjudicando al municipio y a sus vecinos".
En un comunicado este colectivo lamenta que el Gobierno central siga dando pasos para construir una autovía que "dañará de muerte a la mayoría de las parroquias del municipio".
Argumentan que la futura licitación del proyecto constructivo supondrá más de 100 millones de dinero público "en un tramo de una vía que ningún ciudadano particular demanda y que solo beneficiará a las constructoras".
Esta plataforma de afectados cifra el coste total de la autovía en "más de 300 millones, unos 3.750 euros por pontevedrés" pero "Pontevedra seguirá sin circunvalación si se remata la A-57. Tampoco conectará Pontevedra con Madrid, ya que ni está ni se espera el proyecto de conexión con la A-52. Esta autovía nace y desemboca en la AP-9 y así seguirá décadas".
Entienden que la reciente aprobación del expediente de información pública "insiste en un error que se lleva cometiendo desde Madrid desde hace más de 20 años, demostrando que no conocen el terreno y evidenciando su falta de sensibilidad con Pontevedra, en parte, por la poca implicación de la política local y la falta de conocimiento del trazado".
Si el proyecto sigue adelante, advierten de que "multitud de vecinos y centenares de casas van a estar afectados por esta autovía, muchas de ellas quedarán enterradas en los nudos de acceso que se van a construir en las parroquias de Bora y Xeve".
Para ellos este trazado supone una "flagrante vulneración de los valores medioambientales y patrimoniales" y ha recuerdan que suscitado 60.000 alegaciones en contra.
Según han destacado estos vecinos, el informe de impacto ambiental "reconoce que la vida a 230 metros de la autovía será muy difícil por los niveles de ruidos, que superarán el límite permitido". El documento identifica más de 170 casas en esta situación en Bora y Xeve.
El proyecto afectará a 6 hectáreas de Red Natura de Especial Protección en las inmediaciones del Lérez, y patrimonio como mámoas y un camino medieval. Todavía no se ha especificado el número de casas que tendrán que ser expropiadas.