La llamada 'Justicia Restaurativa', un "complemento a la justicia penal tradicional" que busca transformar al delincuente y escuchar a la víctima, ha llegado al centro penitenciario de A Lama. La cárcel pontevedresa se ha convertido en este año 2021 en la primera gallega en implantarla y, en sus primeros meses, ha promovido dos talleres de diálogo restaurativo tanto en el medio abierto del CIS de Vigo como en el régimen ordinario en el propio penal.
La directora del centro, Teresa Delgado, ha dado a conocer esta novedad este viernes con motivo de la conmemoración del Día de la Merced, jornada que cada año se dedica al reconocimiento del servicio público penitenciario y que, por segunda edición consecutiva, se ha trasladado a la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra por razones derivadas de la pandemia de la covid-19, en un acto presidido por la subdelegada, Maica Larriba.
Teresa Delgado desveló durante su discurso en el acto la "apuesta en firme" del centro por esta Justicia Restaurativa, una justicia reparadora que, tal y como recordó, tiene como objetivo la "asunción de la responsabilidad delictiva y el entendimiento del daño causado a la víctima y a la sociedad" y también "promover la transformación en las personas orientada a romper el itinerario delincuencial y evitar así la reincidencia".
Con la puesta en marcha de esta iniciativa y de la participación de las personas condenadas en talleres de diálogos restaurativos, A Lama se confirma como centro de referencia en la aplicación de programas de tratamiento e iniciativas enfocadas a la reinserción de las personas privadas de libertad en la sociedad una vez cumplida su condena.
La directora del centro realizó especial mención a este trabajo durante su discurso en el día de la patrona de la institución y destacó que "pese a las dificultades" derivadas de la pandemia de la covid-19, en A Lama han logrado "mantener e impulsar" programas de tratamiento, la actividad educativa, formativa, cultural, deportiva y ocupacional. Atribuye el logro al "empeño de la plantilla", que ha logrado que el centro siga siendo "un ejemplo en el campo de la rehabilitación e integración de las personas".
"Solo construyendo espacios de tratamiento y de reeducación para las personas que han cometido un delito podemos dar respuestas eficaces a la sociedad", insistió Teresa Delgado, que también hizo hincapié en que no es suficiente con realizar un trabajo individual con cada persona privada de libertad, sino que también es necesario "conectar con las necesidades del cambio estructural de la sociedad".
Para lograrlo, sigue apostando por implantar políticas de igualdad e incorporar la perspectiva de género de forma transversal en toda la vida en prisión y las acciones que se programan desde la Dirección. Recientemente, ha creado un departamento específico de igualdad "con el propósito de promover la aplicación efectiva del principio de igualdad entre hombres y mujeres".
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