El 14 de enero de 1987 también hacía mucho frío en Pontevedra, pero aquel miércoles de hace 38 años nevó en la Boa Vila convirtiendo aquella jornada en memorable.
Los primeros copos empezaron a caer a primera hora, sobre las nueve menos cuarto, y salvo pequeños incidentes todos lo recuerdan como un día de diversión, especialmente en colegios e institutos. Los termómetros marcaron una temperatura negativa de 3,6 grados.
Lo inusual de la estampa detuvo el ritmo de la Boa Vila con multitud de personas que salieron de sus centros de trabajo para contemplar la escena y para jugar, ya sea lanzándose bolas de nieve o haciendo un muñeco.
La situación meteorológica de hoy es bien distinta, con cielos mayoritariamente despejados gracias a la influencia del anticiclón centrado sobre Francia. En la capital temperatura mínima registrada por ahora se sitúa en los 4 grados y no se esperan cambios significativos.
La predicción a medio plazo que hacen los técnicos de Meteogalicia apunta que durante los próximos días nuestra Comunidad se mantendrá en la influencua de las altas presiones con régimen de vientos de componente este. Así, se espera muy baja probabilidad de precipitación en general, aumentando en los comienzos de la próxima semana.
Las temperaturas propias de la época del año, helando en zonas de interior.