La violencia machista ha vuelto a dejar este 2024 los titulares menos deseados en Pontevedra, aquellos en los que se relata el crimen de una mujer. El año ha dejado una víctima pontevedresa, una vecina de Salcedo asesinada en Moaña.
El asesinato se produjo el 5 de octubre. Fadoua Akkar, vecina de Salcedo de 41 años, fue asesinada supuestamente por su pareja sentimental, A.C.T., de 47 años y vecino de Moaña. El hombre conducía un coche y se tiró al mar en Domaio. Al caer, ella falleció y él sobrevivió.
El crimen dejó dolor en Pontevedra. Y también unión política para condenarlo.
Representantes de los tres partidos políticos con representación en la corporación municipal acudieron a la concentración convocada delante de la Audiencia Provincial al día siguiente, en la que se leyó un comunicado dejando claro que "estaremos a un lado de Fadoua y de su familia para exigir justicia y dignidad". Al día siguiente, hicieron lo propio ante la Subdelegación del Gobierno.
Fadoua Akkar llevaba poco tiempo viviendo en Pontevedra, en la parroquia de Salcedo, con su hijo de 13 años, pero ya tenía arraigo en la zona. De origen marroquí, la mayor parte de su familia estaba asentada desde hace tiempo en el vecino municipio de Vilaboa. El crimen tiene dos víctimas, la propia fallecida y su hijo que queda huérfano.
El supuesto asesino fue detenido en el hospital Povisa, donde ingresó tras ser rescatado del agua. Luego, ingresó en prisión.
En este caso, este hombre estaba en el sistema VioGén por unos hechos violentos acaecidos en el año 2012.
La Audiencia Provincial de Pontevedra le condenó e ingresó en prisión. Además, tuvo una orden de alejamiento vigente hasta el año 2020 con respecto a la mujer víctima de aquellos hechos.
El arma del crimen de Fadoua fue un coche. Y también fue el instrumento utilizado por otro crimen que marcó la actualidad de 2024. Se trata del de Jéssica Méndez en Barro en marzo de 2022, que llegó a juicio este año.
En el banquillo se sentó a José Carlos Eirín y el jurado le declaró culpable del asesinato con alevosía y agravante de género. Luego, la Audiencia Provincial de Pontevedra le impuso 22 años de prisión.
El jurado concluyó que el acusado llevaba años acosando a Jéssica, "sometía a la víctima a seguimiento y vigilancia desde hacía años", una situación de control, a pesar de que nunca fueron pareja.
La sentencia, como el jurado, declara probado que actuó "con el propósito de acabar con la vida" de Jéssica Méndez y "dirigió intencionadamente" su vehículo contra el de ella. Como consecuencia del impacto, ella sufrió lesiones muy graves que determinaron su muerte al día siguiente.
En este caso, la sentencia insiste en que el acusado "eligió de forma consciente" su coche como "medio comisivo" para matar a su víctima, pues con él podía "asegurar el resultado de muerte perseguido".
Cuando se celebró el juicio, en marzo de 2024, un grupo de vecinos de Verducido se concentró ante la Audiencia con la pancarta "Os veciños esiximos Xustiza para Jéssica". La joven asesinada, que residía en el momento del crimen en Portas, se crió entre Verducido (Pontevedra) y Barro.
Por la Audiencia también pasó en septiembre un hombre acusado de asesinato en grado de tentativa, con las agravantes de género y parentesco por intentar matar a su ex pareja en Monte Porreiro en abril de 2023. El hombre reconoció que la acuchilló dos veces en la vivienda que compartían y justificó que fue "un momento de rabia".
AGRESIÓN SEXUAL EN UN CONCIERTO
La violencia machista también cobró la forma de agresión sexual este 2024 en Pontevedra. En agosto, durante las Festas da Peregrina, la Policía Local detuvo a un hombre de 27 años por un posible delito de agresión sexual.
Ocurrió durante el concerto del rapero Delaossa en la plaza de España. El hombre presuntamente le realizó tocamientos sin consentimiento a tres chicas, dos de ellas menores de edad, lo que provocó un breve enfrentamiento con otras personas del público.