Fue una auténtica sorpresa para la mayoría, especialmente para los vecinos de los municipios implicados, descubrir como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo anunciaba la fusión de los concellos de Cerdedo y Cotobade.
Fue el 23 de febrero. Silvestre José Balseiros y Jorge Cubela, ambos alcaldes del PP, comparecían sonrientes junto al el jefe del Ejecutivo autonómico para dar la noticia.
Sería la segunda fusión de ayuntamientos en prácticamente medio siglo en Galicia.
El proceso se culminó el 22 de septiembre. Pero el camino estuvo cargado de polémica desde el principio.
El municipio resultante de esta fusión, que lleva el nombre de Cotobade-Cerdedo, suma 6.071 habitantes, 89 menos que el año anterior. Precisamente éste es el principal argumento esgrimido por los impulsores de esta unión, la despoblación y el envejecimiento que sufren ambos municipios.
Los contrarios a esta maniobra criticaron desde el principio la falta de análisis y estudios que avalasen esta decisión, y más grave todavía, reprocharon la "falta de democracia" por no haber consultado en ningún momento a los vecinos afectados.
Para este 2017, borradas ya las fronteras, Cubela, presidente de la gestora que gobierna en Cerdedo Cotobade, recuerda que el nuevo municipio tendrá un acceso "prioritario" a los fondos y a las inversiones de la administración autonómica y, prácticamente, tendrá el doble de presupuesto para financiar los servicios públicos.