"Es casi imposible observar un atardecer y no soñar", declaraba el filósofo británico Bernard Williams.
El atardecer es uno de los momentos más mágicos, cuando el Sol atraviesa el plano del horizonte y poco a poco desaparece, marcando el final del día.
Recorremos en fotografías las puestas de sol más románticas de la Ría de Pontevedra, donde las aguas del río Lérez confluyen con las del océano Atlántico.
El 14 de febrero, Día de los Enamorados, la cita con este fenómeno de la naturaleza será en la Ría de Pontevedra a las 19:03 horas.
En ese momento, ya es tradicional que decenas de personas se congreguen en las barandillas y en los asientos del paseo peatonal que discurre por la desembocadura del Lérez en dirección Pontevedra-Marín por la costa.
Otro punto que recogemos es el paseo de la playa de Laño, muy transitado por los vecinos de la parroquia de Samieira, en Poio.
Hay personas que viven con tal intensidad los atardeceres que pueden llegar a desplazarse para buscar ese momento único en diferentes lugares. En la lengua inglesa hay un término específico para esta condición: 'opacarophile' pero de momento no tiene su correspondencia en lenguas hispanas. Así lo reconocía la Real Academia Española de la Lengua mediante un tweet en respuesta a una consulta de @lavecinarubia.
La RAE informa de que no constan ejemplos del uso de este término en textos escritos en español, y propone en su lugar otra palabra que, pese a no estar aún incorporada al diccionario oficial de la RAE, sí que se ha advertido su uso: 'selenofilia', derivada del término griego 'selene', que significa 'Luna'.