Parte de la culpa de que Pontevedra ha sido escenario de la Gran Final de las Series Mundiales la tiene Javier Gómez Noya, con su larga y exitosa trayectoria en la que ha conseguido cinco títulos mundiales en distancia olímpica preparándose desde la Boa Vila.
Por ese motivo, ya retirado de la modalidad olímpica, era obligado un homenaje al que es el mejor triatleta de la historia por palmarés.
Gómez Noya, tras la espectacular carrera masculina de la Gran Final, recibió un obsequio conmemorativo, un cuadro con sus seis tritrajes más especiales, el de la medalla de Plata en los Juegos Olimpicos de Londres y los de los cinco mundiales que ostenta en su palmarés.
Todo ello rodeado de su familia, amigos, representantes de Federación Española y World Triathlon e instituciones. También con su hija de menos de un año de edad en brazos, y que recibió un traje de triatlón de la Selección Española.
En el acto se proyectó además un vídeo con palabras de grandes mitos del deporte gallego, nacional e internacional. Rivales y amigos del triatlón como Iván Raña, Mario Mola, Alistair Brownlee, Gwen Jorgensen o Ryan Sissons, pero también de otras disciplinas como Pau Gasol, Carolina Marín o Teresa Portela.