Sanidade sigue sin autorizar la presencia de más de 1.000 espectadores en los campos de Segunda B

Pontevedra
15 de octubre 2020

Racing de Ferrol y Deportivo se han visto en la obligación de paralizar por un lado la campaña de abonados y por otro la venta de entradas para la primera jornada liguera. El Pontevedra, a la expectativa de cara a la siguiente semana y a su primer partido en Pasarón

Grada de Fondo Norte en el partido entre Pontevedra y Real Madrid Castilla en Pasarón Cristina Saiz

Preocupación en el Pontevedra Club de Fútbol ante las noticias que llegan desde algunos de sus rivales, concretamente Racing de Ferrol y Real Club Deportivo, de cara al estreno liguero de la Segunda División B.

Al igual que los granates tanto el Ferrol como el Deportivo han elaborado y enviado a la Xunta un protocolo para intentar ampliar el aforo máximo de espectadores en sus respectivos estadios, y que según la normativa actual se sitúa en 1.000 personas en eventos al aire libre. Desde el Pontevedra estaban hace unos días convencidos que la aprobación de dicho protocolo permitiría la entrada al Estadio Municipal de Pasarón de todos los socios actuales que lo deseasen. Así lo destacó la propia presidenta, Lupe Murillo, en la presentación de la campaña de abonados.

Algo similar ocurría en los equipos gallegos del norte, con un Deportivo desbordado por la aceptación de su campaña de socios y un Racing de Ferrol que también contaba con dar cabida a sus abonados en el duelo del próximo domingo en A Malata precisamente ante el Pontevedra.

Sin embargo, ya avisó hace unos días en Pontevedra el Secretario Xeral para o Deporte que la aprobación definitiva de estos protocolos recaería en la Dirección Xeral de Saúde Pública, y esa autorización todavía no ha llegado.

Esta situación ha motivado la paralización de la campaña de socios del Racing. "El club ha presentado un protocolo con el objetivo de albergar un número de aficionados en el estadio que cumpla, por un lado, con la normativa de seguridad y salud y, por otro lado, con el deber que tenemos para con nuestros socios de permitirles la entrada en A Malata. Actualmente estamos a la espera de la resolución de dicho protocolo", explica en un comunicado el club ferrolano.

Por su parte la entidad coruñesa se ha visto obligado a suspender la venta de entradas para su duelo en Riazor frente al Salamanca, que desde este martes podían retirar sus socios protectores. "El Real Club Deportivo reitera las disculpas a todos sus socios por los inconvenientes causados por los constantes cambios en la organización del partido de este fin de semana motivados por la incidencia de la COVID que, como el resto de actividades sociales, está obligando a variaciones inesperadas que condicionan y fuerzan a corregir decisiones ya tomadas o las que se deberán tomar en cada momento", ha señalado la entidad blanquiazul.

De no aprobarse los protocolos, la asistencia máxima a los estadios de Segunda B sería de 1.000 espectadores, una cifra que desde el Pontevedra, que no se estrenará en casa hasta la siguiente jornada frente a Unionistas, consideran a todas luces insuficiente comprometiendo su viabilidad económica de mantenerse a lo largo de toda la temporada.