Tarde de balonmano en Pontevedra la de este sábado con dos partidos consecutivos de los dos equipos de la ciudad. El Cisne recibe al Handbol Bordils a las 17.30 horas en la cancha de CGTD y el Teucro, al Cajasur de Córdoba, a las 20.30 horas en el Municipal. La victoria es el objetivo de ambos. Los blancos la quieren para afianzarse todavía más en el liderato y los azules, para cerrar una convulsa primera vuelta en puestos de playoff.
"No nos podemos relajar si queremos sumar de nuevo en casa. En la clasificación están abajo pero no han perdido ningún partido de más de tres goles", advierte Quiños, el segundo entrenador del Cisne, sobre el rival del sábado que marcha en décimo tecera posición con 12 puntos en su casillero. En un sentido similar se pronuncia Luis Montes sobre el Cajasur. "Entre la zona de ascenso y descenso hay cuatro puntos, están a cuatro puntos de nosotros, lo que habla de la igualdad de la categoría", remarca el entrenador teucrista.
Aun así, en el vestuario de ambos conjuntos son sabedores de que son favoritos y este sábado no se conformarán con otra cosa que no sea la victoria. "Cuentan con un siete inicial muy bueno, con mucha experiencia en la categoría. Quizás el problema lo tienen en las rotaciones, pero está claro que ningún equipo ha conseguido ganarles fácil", expone el técnico blanco. "Fuera de casa no se están mostrando tan fuerte como locales, pero recuperan a Andrés Moyano, que será muy importante para ellos", subraya Luis Montes que espera que sus jugadores ofrezcan en el Municipal la misma buena imagen que esta campaña están ofreciendo a domicilio.
El hecho de haber conseguido ganar en la cancha del Alarcos, en la que no había ganado ningún visitante hasta la visita del Teucro, subió la moral y la confianza de la plantilla azul. "Necesitábamos la victoria, ningún equipo roto y en descomposición habría ganado en Ciudad Real", espetó Montes para resarcirse de las críticas que había recibido el equipo en las últimas semanas después de la marcha de los serbios Perovic y Bojicic. "El vestuario se ha crecido y los jóvenes están ayudando".
Con el impulso del último triunfo, los azules esperan demostrar de una vez por todas su verdadero nivel ante su público, para lo que el entrenador pontevedrés aprovechó para pedir apoyo a la hinchada. "Si todos echamos una mano y si el público presiona al contrario, a los árbitros y nos anima, nos ayudarán", afirmó Montes, que solo dispone de nueve jugadores de campo del primer equipo, por lo que volverá a echar mano de la cantera y del último fichaje, Adrián Freiría, para completar la rotación del equipo.
Reconoció además que por el momento descartan realizar fichajes, pero la dirección deportiva permanece muy atenta a las oportunidades que pueda brindar el mercado.