El Complejo Deportivo Rías do Sur sigue a la espera de poder acometer el llenado de su piscina olímpica de 50 metros como paso previo a su puesta a disposición de los clubes deportivos que allí centran su actividad.
El acuerdo alcanzado con la Fundación Rías do Sur con la empresa Supera (Sidecu), por el que la concesionaria ha renunciado a los años de explotación que le restaban por contrato, ha despejado el panorama pero no lo ha aclarado por completo.
Aprovechando que fue necesario vaciar el vaso de la piscina para acometer una serie de tareas de mantenimiento, la Fundación ha contratado obras "como la sustitución de todo el sistema hidráulico del vaso de 50, reparar la climatización, temas de recogida de aguas y ciertas cosas que había que hacer aprovechando que continúa el estado de prealerta por sequía y que ENCE está por el momento parada", explicó tras el acuerdo el presidente de Rías do Sur, Héctor Vilariño.
Esos son ahora los dos aspectos clave para que el Complejo Deportivo de Ponte Muíños recupere la plena actividad, y es que hasta que no se ponga fin a la prealerta por sequía no se podrá acometer el llenado de la piscina olímpica. Por otro lado, con ENCE sin actividad por el mismo motivo, tampoco se podría calentar el agua al ser la empresa la que aporta la energía calorífica necesaria.
"El primer día que se levante la prealerta abrimos la llave para llenar, siempre y cuando ENCE nos diga que está en disposición de dar calor, porque la instalación no dispone de caldera suficiente para calentar el agua, aunque quisiéramos no podríamos", asegura Vilariño.
Por ese motivo el futuro de la pastera está, a día de hoy, ligado también al de Rías do Sur.