Pontevedra y Cacereño aburren en un partido con poco fútbol y sin ocasiones (0-0)

Pontevedra
17 de enero 2016

Pontevedra y Cacereño firmaron posiblemente el partido más aburrido de la temporada en Pasarón. poco fútbol, ausencia de ocasiones de peligro en ambas áreas y un tiempo para cada equipo, o casi, podría ser el resumen de un reparto de puntos tan justo como insulso

Partido entre Pontevedra y CP Cacereño en Pasarón
Partido entre Pontevedra y CP Cacereño en Pasarón / Diego Torrado
Declaraciones de Luisito tras el empate ante el Cacereño /

Pontevedra y Cacereño firmaron posiblemente el partido más aburrido de la temporada en Pasarón. poco fútbol, ausencia de ocasiones de peligro en ambas áreas y un tiempo para cada equipo, o casi, podría ser el resumen de un reparto de puntos tan justo como insulso.

Los granates, que jugaron a merced de un rival sin mordiente durante 35 minutos, fueron superiores en otros 20 (los últimos 10 de la primera mitad y los primeros 10 de la segunda). Luego dominaron, pero estuvieron espesos, desacertados en el pase e inofensivos de cara a la puerta contraria.

La primera parte local fue para olvidar. A merced de un Cacereño que se adueñó del balón, el Pontevedra, incapaz de dar dos pases con sentido y perdido en la zona ancha, fue inferior a un rival bien posicionado, que sacó provecho de su superioridad en la medular para llegar con tanta frecuencia como falta de profundidad a las inmediaciones del área defendida por Edu.

Juego trabado, imprecisiones en los pases y escasas llegadas al área. Las opciones de ataque local se limitaban a lanzamientos de esquina que no crearon problemas a la zaga extremeña.

Por su parte, el Cacereño traducía su dominio territorial en dos lanzamientos lejanos que no inquietaron a Edu, y un tercero, obra de Cuerva, el único con cierto peligro, que el meta granate tuvo que mandar a corner.

Para entonces, Luisito, al que tampoco debía gustarle lo que estaba viendo, mediado el primer tiempo, ya había mandado calentar a Pablo Carnero, buscando la forma de hacerse con el control del partido.

No fue hasta pasada la media hora de juego cuando el Pontevedra empezó a dar síntomas de mejoría. Lo hizo a través de un disparo de Queijeiro, desviado, y un par de llegadas por banda, subiendo el nivel de intensidad en la disputa y en la presión, hasta entonces inexistente, que hizo al Cacereño ceder metros ante el empuje local. Aún así, la única consecuencia fue un par de roces entre Jacobo y Palero, que terminó con ambos amonestados.

Los comienzos de la segunda parte dieron la sensación de que el partido podía cambiar, pero el espejismo duró apenas 10 minutos. Luisito dio entrada a Pablo Carnero, pero sorprendió dejando en la caseta a Pedro García, cuando todo apuntaba a que el sustituido sería un desafortunado Queijeiro. No surtió efecto. El delantero evidenció su mal momento de juego y no fue la solución pretendida.

Eso sí, los granates ya no sufrieron. Controlaron el partido y dieron sensación de estar varios peldaños por encima de su rival, pero lo hicieron tan a cuentagotas que el Cacereño, ahora sin balón, no sufrió. Únicamente un disparo de Jacobo en el primer minuto de la reanudación, que Vargas mandó a corner y una llegada de Verdú, que no pudo aprovechar un buen pase de Queijeiro, fueron los únicos síntomas de peligro.

Los visitantes, que demostraron buen trato de balón en corto, pero muchas carencias para el pase final, se entregaron a la tarea de defender el empate, sin salir apenas de su parcela defensiva, aunque sin pasar agobios, dejando transcurrir los minutos en medio del aburrimiento y la ausencia de jugadas de peligro.

PONTEVEDRA CF (0): Edu; Adrián, Pablo (Tomás, minuto 81), Capi, Verdú; Kevin Presa, Queijeiro, Pedro García (Pablo Carnero, minuto 46); Jandrín (Anxo, minuto 81), Borjas y Jacobo.

CP CACEREÑO (0): Vargas; Palero, Mansilla, Gonzalo, Toni; Aarón; Cuerva, Leo (Álex Díez, minuto 87), Amaro; Koffi (Zubi, minuto 74) y Valverde.

Árbitro: Alberto González Hernández (Castellano-Leonés), auxiliado en las bandas por Alfredo Ramos Díez y Carlos Gallego Hernández. Amonestó a Verdú, Jacobo y Borjas, por el Pontevedra, y a Palero, Toni, Zubi y Aarón, por el Cacereño.

Incidencias: Estadio Municipal de Pasarón (Pontevedra). Unos 3.000 espectadores.